Como
decía en la entrada anterior, en esta continuaremos con algunos
aspectos de la elección de las técnicas del bertsolari, y los tipos
de competición que se dan entorno a ellos.
Así,
siguiendo con la entrevista a Fredi, y volviendo a la elección de la
música, la bertsolaritza, para él, tiene un problema básico: la
intelectualización que se le dio en una época. Mientras que en todo
el mundo, los improvisadores son músicos, aquí están bastante
alejados de la música. En general, son más bien escritores. Se
tiende más a la vertiente literaria que a la musical.
Continúa
Fredi explicando que a el siempre se le había enseñado, (y los
antiguos bertsolaris así lo hacían, y él a sus alumnos asi se lo
transmitió), que cuando se escucha un tema, eliges la melodía en
relación al tono con el que quieres hablar del mismo. Por ejemplo:
“...yo, si quiero hablar de una tragedia, elegiré una
melodía trágica, si quiero hablar de comedia elegiré una más
alegre, aunque se pueden hacer juegos. Yo, en este último
campeonato, he jugado a hacer humor con melodías trágicas y crear
una tragicomedia...”.
El
bertsolari utiliza técnicas de preparación, lo que vulgarmente se
llamaría ensayos. Se utilizan simulaciones. Amuriza plateaba algunos
ejercicios. Por ejemplo “...tu eres un par de zapatos, que
está delante de la puerta de una casa...”; te plantea el
entrenador: “...bueno, ahora canta desde un punto de vista
dramático...”, tú sigues: “...he enfermado esta
noche, me han sacado en ambulancia y no me ha dado tiempo a ponerme
los zapatos...”; ahora hazlo desde un punto de vista
cómico, y empezarías “...he llegado tarde a casa y para que
no me oiga la mujer, me he quitado los zapatos...”. Todo el
rato el mismo tema girando en función de la situación.
Entre
las actuaciones que realizan los bertsolaris están (el bertso poteo,
los desafíos de Balkoitik Balkoira y la Txapelketa). Entre estas
modalidades existen grandes diferencias.
En la
primera, el Bertso Poteo, el canto es libre sin temas; el
contexto es importantísimo: tienes que estar cantando lo que está
pasando a tu alrededor Si se cae un vaso tienes que cantarle a ese
vaso.
En el
Balkoitik Balkoira, (una modalidad en la que dos bertsolaris
cantan sus bertsos desde sendos balcones rememorando una tradición
que data de 1802 y que se llevó a cabo por primera vez en Tolosa).
Esa actuación es más difícil, ya que no se tiene contacto con el
otro bertsolari. Para cambiar melodías hay que crear un historia. En
este caso hay que crear el contexto. A veces, un poco antes, se ponen
de acuerdo para crear dicho marco. Por ejemplo, si están el el
Puerto Viejo, crear historia de piratas. Hay tres formas de
respuesta: al final del oponente responderle con tu final, a su final
responderle con tu principio, o si no, por el medio del bertso.
En los
Campeonatos o Txapelketas, estás totalmente a merced de los temas
que te ponen. En este caso, lo que pasa en el contexto, alrededor, no
tiene importancia. Al principio se hace un sorteo que no lo ve la
gente; para ver en qué posición se empieza. Del 1 al 6, las finales
son de 8 y el resto de eliminatorias de 6. Los temas son elegidos con
anterioridad. Se va respondiendo y tienes libertad de elegir el tono
en el que vas a responder.
Fredi
Paia ha participado en varias “Txapelketas”, en
profesionales 6 en Bizkaia, 4 de Euskal Herria. La primera en la que
participó fue en el año 1999, con 18 años, en el Campeonato de
Bizkaia, en el Euskaduna, quedando clasificado en quinto lugar.
Seguimos
desgranado aspectos técnicos del bertsolarismo. Entre estos
ejercicios llegamos a uno denominado “Punto Corrido”
(Lehenego Puntua Emanda),
o el arranque forzado. Es cuando una persona empieza el bertso y tú
tienes que acabarlo. Es el único ejercicio donde se rompe la técnica
de construir bertsos, que es: yo empiezo pensando el final. Cuando
otro empieza el bertso, ya me ha marcado la rima, por lo que dependes
totalmente de él. Fredi lo compara con los penaltis en el fútbol.
En los campeonatos es lo mas difícil hacer. Se necesita chispa y
rapidez en la composición. El Azpeitiarra Joxe Aguirre Esnal
“Oranda” (1929-2012), de quien una de sus
principales virtudes fue la agudeza y el ingenio, que acompañaba de
una exquisita técnica en cuanto a rima, métrica y sobre todo un
lenguaje claro y nítido, hicieron de él un gran maestro en esta
técnica.
Otra de
ellos es la “Kartzela” En el escenario se queda un
bertsolari y los otros van a lo que se denomina la cárcel
(habitación aparte). Es un ejercicio que se creó para medir a los
bertsolaris en igualdad.
En los
años 30 se les ponía a todos los bertsolaris el mismo tema. Cada
uno oía lo que cantaba el otro, así que el que cantaba el 8º tenia
tiempo para preparar un gran bertso. Se vió que el método no era
bueno, no había igualdad, y se crea la Kartzela. Los bertsolaris van
saliendo uno a uno, sin oirse, lo que permite compararles ante un
mismo tema. Pero esto también tiene, para estos artistas del bertso,
sus trucos.
Por
ejemplo: “...si tú eres el último en actuar, sabes de
antemano que lo mas obvio es que sobre ese tema .Los demás ya habrán
utilizado casi todos los recursos, así que tienes que elegir cosas
extrañas, mientras que si actúas el primero puedes elegir lo que
vas a cantar...”.
Otro de
los aspectos a señalar, es la forma en la que se prepara un
bertsolari. Para Fredi es muy importante una buena preparación
física (correr, nadar). El motivo de estar bien preparado
fisicamente se debe a que durante la actuación, tienes que estar
tres horas en tensión, y si no estás bien fisicamente “...la
cabeza se te viene para abajo...”, tú mismo te das cuenta
de que “...!si he empezado tan bien!, ¿por qué en los
últimos bertsos me costaba tanto?...”, la respuesta es:
“...falta de forma física...”.
El
entrenamiento de un bertsolari tiene dos partes, la “Simulación,”
que consiste en simular lo que voy a hacer y la “Disimulación”
que consiste en escuchar comentarios ingeniosos en cualquier lugar,
leer, oir canciones de cantautores, en definitiva todo lo que sea
gimnasia mental.
Pero
algunos bersolaris, y es el caso de Fredi Paia, compaginan esta
actividad, con otras formas de creación: la música. De este aspecto
hablaremos en la próxima entrada, de su grupo “Gibelurdinek”.
Un cuarteto Getxotarra que nos deleita con sonidos, ritmos y
canciones provenientes de diferentes culturas y pueblos. El grupo
está formado por Fredi Paia, Josu Aurrekoetxea, Ekain Iurrebaso y
Katxo Larrazabal. Utilizan instrumentos autóctonos de Euskal Herria
y han sido responsables de la banda sonora del filme “Sua”,
producida por Eneko Aritzaren Lagunak.
Sobre
este grupo hablaré en la próxima entrada por la relación tan
cercana de algunos de sus miembros con el mundo del bertsolarismo, y
por su aportación a la música popular vasca en nuestro municipio.
Pero
antes de terminar estas entradas relativas al bertsolarismo en Getxo,
quiero despedirlas con un precioso bertso, escrito por uno de
nuestros bertsolaris locales Josu Landeta, en formato de décima, al
igual que hacen los payadores argentinos, que también improvisan
como nosotros. Su contenido va sobre el bertso en sí, y todo el
proceso que ha tenido desde su origen en los núcleos rurales, hasta
su integración en las zonas urbanas por medio de las escuelas de
bertsolaris, es decir, de la pequeña taberna al gran escenario.
BERTSOARI
GORAZARREA
Behin
baserriko larre berdeetan
jolas
printzez apainduta,
kale
ilunetan murgildu zinen
esperantzaz
zamatuta.
Han
lau bizardun idealistak
doinu-izpiz
altxatuta,
handi-mandien
kontsignek zelan
zintzaketen
zu ezkuta?.
Herrian
zehar biluzik zoaz
kultur
jantziz beztituta;
zure
eskolak babestuta,
zure
berbei zurrupa,
gaur
ume, gazte eta helduok
maiteminez
gaituzu ta
lozorroan
den herri hau pizten
jarduten
dugu kantuka.
“Hace
ya tiempo en el campo
vestido
con manto lúdico
fuiste en
busca del éxito
a la
ciudad, y con tiempo
se
demostró tu talento.
De
cultura vas formado,
y con
amor, a tu lado,
con
fuerza hemos de cantar
para
poder despertar
a este
pueblo adormilado”.
Hasta aqui esta pequeña historia sobre el bertsolarismo en Getxo.