El
origen y desarrollo histórico de las cooperativas de consumo en el
País Vasco es consecuencia de los logros alcanzados por el
incipiente movimiento cooperativo que había comenzado a surgir en
Europa a mediados del siglo XIX.
A
finales de dicho siglo aparecen en Vizcaya las primeras Cooperativas
de Consumo, estaban estrechamente vinculadas al incipiente movimiento
siderúrgico, que empezaba a establecerse en la cuenca del bajo
Nervión.
Alrededor
de 1.900 comenzó un proceso de transformación interna en el
espacio urbano de Getxo, se trató de la progresiva sustitución del
turismo en sus distintas variantes como fundamento y clave de la vida
económica y social por actividades de nuevo cuño, en lugar de pasar
sólo una temporada, sus residentes bilbaínos comenzaron a trasladar
a este lugar su residencia definitiva.
La
actuación de grandes propietarios y su vinculación con redes de
transporte de cercanías (tranvía o ferrocarriles) fue trascendental
para los cambios que se iban a producir en el plano urbanístico.
La
llegada de trabajadores de otras zonas del estado para trabajar en
aquel ferrocarril, trabajadores que al igual que los locales,
necesitaban unos de vivienda y todos, debido a la escased del mercado
y a los costes de los productos, de un comercio que abaratara los
mismos.
Uno
de los principales problemas con que se encontraron los trabajadores
fue el de la vivienda, si para los locales esta cuestión constituyó
un problema de primer orden desde los comienzos de la
industrialización de la zona, habida cuenta del gran déficit
existente de viviendas asequibles a su capacidad adquisitiva, el
problema adquirió unos caracteres especialmente graves para los
trabajadores venidos fuera.
Se
puede considerar que en la evolución de la población del entorno de
Getxo, tienen una gran importacia la llegada de los medios de
comunicación, el tranvía de Bilbao a
Las Arenas y Algorta lo haria en 1.877 (eléctrico desde 1.896), el
ferrocarril de Bilbao a Las Arenas en 1.887, el ferrocarril de Las
Arenas a Plentzia en 1.893, y el Puente Bizkaia que unió ambas
margenes de la ria en1.893.
Antes
de la Guerra de 1.936, se localizaban las primeras cooperativas en
Bilbao, en la margen derecha de la ria en localidades como Erandio y
Leioa, tambien en la margen izquierda Sestao y San Salvador del
Valle, en algunos casos se limitaban a ser sociedades que agrupaban
un número variable de obreros, los cuales se encargaban de despachar
la mercancía, que previamente habían comprado al por mayor, por lo
que la apertura del establecimiento tenía lugar al terminar el
trabajo los días de labor y los domingos.
No
obstante es tambien alrededor del ferrocarril, donde se empiezan a
abrir estas Cooperativas, aunque mas bien se les debiera llamar
“Economatos”, y es en Las Arenas donde iba a crearse la segunda
de ellas, ligada esta al ferrocarril.
La
“Sociedad Cooperativa para los Empleados y Obreros del
Ferrocarril de Santander a Bilbao”, que en aquellos tiempos
establecia esa distinción entre los mismos, comienza sus primeros
pasos el 29 de enero de 1.924, siendo Alcalde de Getxo Jose
Iturregui.
En
una carta firmada por Mardaras en representación de aquella Sociedad
Cooperativa, se solicitaba autorización para la apertura de unos
locales para economato, que estarian situados en la propia estación,
con acceso por la calle Mayor de Las Arenas, para sus asociados de
aquella localidad. Adjuntaba un pequeño croquis de la situación
(ver foto inferior).
Aquella
Cooperativa abrio sus puertas en uno de los locales de la estación
de Las Arenas, que daban a la calle Mayor y a los andenes, estaba
junto a las cocheras, y a una “lampisteria”.
Por
otro lado en los años 1.922-1.923, al amparo de las iniciativas de
vivienda social, auspiciadas por el estado, se dió inicio a la
construcción generalizada de alojamientos para obreros, es en ese
contexto en el que parece que los ferroviarios tambien tuvieron la
idea de proyectar un grupo de casas, de las denominadas baratas.
El
20 de Junio de 1931, el Presidente de la Junta Local de Getxo de
“Ciudades Ferroviarias” Feliciano Verganzones y
Benito, con domicilio en Kresaltxu 17 (entoces Cresalchu), se dirigia
al Alcalde de Getxo, indicandole que en Madrid existia una
Cooperativa de casas baratas, cuya finalidad estribaba en la
construccion de dichas viviendas para los empleados del ferrocarril,
dicha cooperativa estaba patrocinada por la “Asociación
General de Empleados y Obreros de los ferrocarriles de España”,
la cual afirmaba tener el capital necesario para la construcción de
aquellas viviendas, a un precio módico.
Hacian
saber al Consistorio que tras largas gestiones, y a pesar de existir
terrenos que por su extensión y situación se hacian idoneos para la
construcción de 100 viviendas que proyectaban construir, no habian
conseguido llevar a buen puerto las mismas, debido al “...precio
excesivo de los terrenos sondeados...”, en aquella misma
misiva decian, que estaba en su conocimiento que el Ayuntamiento
poseia unos terrenos, situados en el lugar denominado “Vega
de Santa Eufenia”, los cuales lindaban con el Campo de Golf
e iban paralelos al rio Gobela, en la misma solicitaban al
Consistorio que “...aquellos terrenos les fueran concedios a
precios economicos...”, para ello recurrian al argumento de
la bondad para los obreros de un lugar asi, ademas, de alguna manera,
chantajeaban con otro argumental, “....la realización de
este proyecto, repercutira en la colocación de buen numero obreros,
remediando la crisis esxistente...”.
Aquel
terreno que el Ayuntamiento tenia en la “Vega de Santa
Eugenia”, se ve que las denominaciones “Eufemia o
Eugenia”, dependian del escribano, por lo que por proceder
de la del Ayuntamiento era la segunda la que parece mas clara en
cuanto a definición del lugar.
Como
decia, aquel terreno tenia una extensión de 36.498,63 m2 (470.101,70
pies cuadrados), no procedia de bienes comunales que el
Ayuntamiento hubiera tenido, sino que habian sido adquiridos en
1.929, para la realización la urbanización y trazado de las calles,
de tal forma que una vez formados los solares y calles, estaba
previsto fueran vendidos para compensar los gastos que el Consistorio
tendria en la ejecución de aquellas calles y solares.
Ademas
habian adquirido el compromiso de vender una superficie de 100.000
pies cuadrados, para la construcción de un Colegio, al precio de 65
centimos el pie cuadrado, en las zonas mas apartadas lindando con
Leioa, tambien estaba comprometido con la apertura de una calle de 15
mts. de anchura, calle que estaba en la prolongación hacia Romo de
la calle que pasando entre las fincas de Valdes y Sota iba hacia
Zugatzarte.
Por
este motivo se denegaba por parte del Consistorio la solicitud de
“Ciudades Ferroviarias” el 29 de Octubre de 1.931,
en la misma se hablaba de que en el plano que se adjuntaba, estaban
señalados los trazados de calles y ensanche de Romo, asi como el
Colegio, una Capilla y jardines para el barrio.
El
10 de Febrero de 1.932 F. Cordobes, secretario de la Junta Municipal
de “Ciudades Ferroviarias”, se dirigia al Alcalde
para solicitar permiso para la celebración de una Junta General
Extraordinaria, en las Escuelas Municipales de Las Arenas, el dia 13
de aquel mes a las diez de la noche, para tratar sobre la
construcción de casas “economicas”. Solicitud que
era aceptada el 12 del mismo mes, firmando la autorización el
Alcalde entonces Jose Antonio de Aguirre y Lecube.
La
unica urbanización de casas baratas en Romo fue la ejecutada por “El
Hogar Obrero”
en 1.924, integrado
por obreros y empleados del tren Bilbao-Las Arenas y por
metalúrgicos,
las mismas reciben popularmente el nombre de “Casas
Baratas”,
se edificaron 80 viviendas, sobre este tema ya trate en la entrada
del jueves,
22 de noviembre de 2012.
En
1.966, debido al traslado de la estación junto al barrio de Romo,
construcción que se inauguraria el 21 de Junio de 1.958, y al
derribo de las viejas instalaciones, situadas en la calle Mayor de
Las Arenas, y entre ellos el economato, el Director gerente de
“Ferrocarriles
y Transportes Suburbanos de Bilbao, S.A.”,
y en su nombre Tomas Garcia Acha, solitaban al Consistorio, el
tralado del mismo a la calle Santa Eugenia de Romo. El 12 de Abril de
1.966 el consistorio accedia a aquella petición, con la condición
de que sus fachadas respetasen lo indicado por los tecnicos
municipales.
Hasta
aquí una breve historia de aquellos movimientos de los ferroviarios
del Ferrocarril de Bilbao a Plentzia, en Las Arenas, en aquellos
años, hubo mas movimientos cooperativos, como el de la “Cooperativa
Civico Militar” o la “Cooperativa de Consumo de
Trabajadores Vascos”, de la que a traves de su libro de
compras, nos aproximara a los usos de la época, pero esta es otra
historia que traere a estas paginas mas adelante.