El
desarrollo del Euskera en Getxo, no se podría entender sin explicar,
para quienes no lo vivieron, la pequeña historia de los Precursores,
aquellos aitas y amas de la Ikastola San Nikolas de Algorta, que de
forma desinteresada con una entrega, hoy dificil de entender,
lucharon y abrieron las puertas a la recuperación del Euskera en
Getxo y Uribe Kosta, ikastola que hoy esta a punto de celebrar su 50
Aniversario.
Se
podria afirmar que este movimiento es la segunda parte del que en su
día surgió de “Las Escuelas
Vascas de Bizkaia”, escuelas
que nacen en 1932 cuando la Federación de Escuelas Vascas
“Eusko-lkastola-Batza” tomó la resolución de
abrir una serie de centros, alguno de uno de aquellos centros
estuvieron localizados en Algorta y en Las Arenas (1.935).
El
origen de lo que luego seria la Ikastola San Nikolas, y de varias
Ikastolas, formó parte de un hecho fortuito, casi intranscendente en
aquel momento, corria el año 1.963, una tarde en una tienda de
Bilbao, Gotzon Garamendi se sorprendió al oir hablar en un perfecto
euskera, a un niño pequeño, Gotzon preguntó cómo habian
conseguido que aquel pequeño tuviera aquel nivel, le explicaron que
existian grupos de alumnos, que en casas particulares realizaban los
estudios en euskera.
Contactará
con Julia Berrojalbiz y Tere Rotaetxe, quienes le prometen enviarles
una andereño si consiguen formar un grupo de 8 alumnos. Ese fue el
embrión y comienzo de aquella “Ikastola”.
Empezaron
con 9 alumnos, las familias fundadoras fueron: Aguirre-Zárate,
Aristegi-Anduiza, Azkagorta-Aretxabala, Garamendi-Gárate,
Garamendi-Uribe, Gárate-Urretxua, Iturriaga-Zabala, Rekalde-Uriarte,
Ceberio-Gárate, en la entrada de la Ikastola, se conseva una placa
conmemorativa, (Ver fotografia inferior).
La
primera andereño de la Ikastola fue Begoña Abaitua, tenia titulo de
Magisterio, sólo impartió sus clases el primer año ya que ganó
una beca de canto y fue a estudiar a Alemania, esta andereño recogia
a los niños en la estación de Algorta y se dirigia al domicilio
asignado para las clases, el curso 1963-64 le sustituyó Itziar
Berrojalbiz, con la que aumentarían los alumnos hasta hacer
necesaria la contratación de otra andereño, Irene Elizondo, las
clases empezaron a impartirse en el domicilio particular de Gotzon
Garamendi, en la calle Bolue, antes Travesía de Villamarte.
Los
inicios fueron increibles, como le habian planteado a Garamendi que
era necesario tener 8 niños y el solo tenia uno, hablo con los
amigos y formaron un grupo de 9 niños, no les dijo nada de lo que
habia que pagar, por miedo a que alguno se echara atrás, el primer
mes lo costeó el, pero ya el segundo mes les dijo “...a esta
hay que pagarle...”, se referia a la andreño, el primer
año, estuvieron en la casa de Gotzon dos meses, al princio para
costear los gastos, se decia cual era el coste, y se pasaba un sobre
anonimo, cada familia metia lo que podia, mas tarde se establecieron
las cantidades que cada familia debia de aportar.
El
segundo año entraron un monton de chavales pequeños, y no sabian
donde meterlos, asi que desmonto la sala, sentados en el suelo,
contra la pared, cuenta Gotzon que “...me dejaron una mancha
de la cocorota en toda la pared...”, las clases en aquellos
comienzos se daban, de forma rotativa, en los domicilios de los
padres, rotaban mensualmente para no ser detectados, rotaron por las
casa de Azkargorta, Lores, Urretxua, aquello empezaba a ser una
locura, se juntaban 20 niños en la cocina de una casa, en la que, ya
los habitantes de la misma, tenian otros 5 niños, poco a poco se
fueron estableciendo pisos fijos, uno de aquellos pisos fijos fue la
casa de Enrique Montano. La
colaboración de familias, aun sin hijos, fue muy importante, la
familia Aldama-Ormaza, ofreció su casa durante un curso.
De
esos días merece ser recordada la maestra de las Escuelas de San
Martin Dña. Felisa (Viuda de Carnero), que les sellaba las
cartillas, y examinaba a los chavales, persona que colaboró
calladamente con la Ikastola, tambien con las hermanas Gorostiaga de
Getxo, que desde Delegación les apoyaron mucho.
Gotzon
Garamendi y Juan Mari Lores el curso 1964-65 viajan a Donosti y
conoce la ikastola de Elvira Zipitria, no le convencen las
condiciones que en ella se imponían, sólo podian acudir niños de
padres euskaldunes y de probado abertzalismo, más tarde contactara
con Carlos Santamaría que les muestra la ikastola de Hernani, con
Jesús Atxa, del grupo Edili, a juicio de Gotzon Garamendi, el mayor
impulsor de las ikastolas y con quien se reunen frecuentemente.
Se
constituye un grupo alrededor de Edili con el fin de impulsar las
ikastolas en la zona. Por último, la visita al Liceo Santo Tomás y
de Karmele Esnal y la observación de los grandes grupos de alumnos
que ya no podían ser clandestinos, les incita a adquirir los locales
de la calle Bidebarri en Algorta.
Ya,
el numero de niños, habia crecio ostensiblemente, pasarian por el
chalet de Urretxua, estuvieron dos cursos, en la calle San Nicolás
(Bajada del Puerto) y muy pronto a unas lonjas en la calle Bidebarri,
que se compraron a nombre de “Inmobiliaria Sarrikobaso”,
y que fueron alquiladas a la Ikastola de Algorta.
Comienza
el proceso de la legalización en el que José Luis Etxegaray, ya
fallecido, juegó un papel importante. En los tiempos de Bidebarri,
la normativa establecia que la clases tenian que estar dividas por
sexos, asi que acordaron, con la colaboración de los niños,
juntarlos, no atendiendo aquella obsoleta norma, eso si cada vez que
anunciaban la llegada de la inspección, por el pasillo de atrás, se
cambiaban rapidamente de clase, los propios niños sabian a que aula
tenian que acudir, para pasar aquel tramite.
La
financiación de la Ikastola siguió varias vias, en primer lugar
mediante los padres, hacian colectas en el pueblo, “...nos ha
apoyado mucha gente...” comenta Juan Mari Lores, incluso
con fuerte cantidades de dinero, para hacer los locales de Bidebarri,
ellos montaron una empresa de representaciones y dedicaban una parte
de los beneficios para las Ikastolas, los primeros Saiokas (libros de
euskera) que salieron, los financiaron ellos, hubo algunos vecinos de
Getxo que como decia anteriormente, ayudaron con importantes
cantidades de dinero, es el caso de los Basterra, Garteiz, Camiña,
Galdeano, Basañez.
Montaron
una Colonia de Verano en Barria (Araba), en un convento de unas
monjas, junto con unos Gipuzkoanos, alli los trabajos fueron
totalmente artesanales, con unos perfiles metalicos construyeron la
camas, las andereños pensaban “...pero como pueden estar los
chiquillos aquí..”, la primera visita que realizaron la
amas “...se quedaron horrorizadas de aquellas
instalaciones...”, pero habia que improvisar y conseguir
que los pequeños tuvieran unas instalaciones en las que pasar
aquellas primeras colonias, en aquellas pasaron tres años, luego
fueron a Lekaroz.
Aquellos
comienzos mezcla de clandestinidad y voluntarismo, corrieron a cargo
de cuatro personas de Algorta, Gotzon Garamendi, Ricardo Manzano,
Juan Maria Lores y Xabier Azkargorta, llevaban a las andereños a los
cursillos a Donosti, se multiplicaban para que aquel proyecto saliera
a delante, compaginaban su propia actividad laboral con la vida de la
Ikastola.
Para
seleccionar a las andereños iban a la Escuela de Magisterio y pedian
las listas de las tituladas que habian salido aquel año, asi sabian
de que pueblos eran y si sabian euskera, entonces visitaban a todas y
las entrevistaban, algunas de aquellas andereños, terminaron su vida
laboral en la Ikastola.
Mantenian
la actividad escolar entre Bidebarri y el “Chalet de la
Belga” de Villamonte, en el triangulo formado por las
calles Villamonte, Villaondoeta y Basarrate, en este chalet tenian el
parvulario y en Bidebarri los cursos mayores.
El
día 11 de junio de 1.969, la Ikastola fue reconocida y autorizada
como Centro no oficial de Enseñanza Primaria, contaba con 202
alumnos, un año despues se crearia la Coopertiva, (Ver cuadro de
evolución inferior).
El
curso 1970-71 comenzó a impartirse la enseñanza preescolar desde
los 3 años y el curso 1976-77 se introdujo el B.U.P., al año
siguiente se abriría también una guardería para niños de dos
años. La primera piedra del actual edificio se puso el 3 de Marzo de
1973. El curso 1982-83 desaparece el B.U.P. que es trasladado
al I.B. Getxo III.
En
el curso 1989-90 ya existen 2 grupos en guardería infantil, 11 en
preescolar y 21 en E.G.B. Desde el curso 1986-87 el descenso
demográfico se hace notar con una disminución
de alumnos que va a continuar en los próximos años.
La
evolución del número de alumnos desde la fundación hasta nuestros
días es la siguiente:
Curso Número de
alumnos
1963-64 9
1970-71 338
1980-81 1.456
1985-86 1.386
1989-90 1.226
El
movimiento de las Ikastolas fue un movimiento muy extendido, muy
universal dentro de cada pueblo, de una gran aceptación popular,
fruto del deseo colectivo, que llevó a dejar en los comienzos, en
manos de aquel profesorado, aun inesperto, el futuro de todos
aquellos niños.
En
la proxima entrada incluiré algunas de las actividades del la
Ikastola de Algorta, que destacaron por su importacia, incluso
internacional.
Joselu, Aupa laguntxoak .1966ko Emen egon giñen. AURRERA!!
ResponderEliminar