Siguiendo
con la entrada relacionada con el Golf en nuestro municipio hoy
traigo a estas paginas a una de las mujeres que mas dias de gloria a
dado a este deporte en el Antiguo Campo de Golf de la Prolongación
de Amaya.
Elvira
Larrazabal Bengoetxea nació
en Las Arenas el 28 de Octubre de 1933, hija de Ángel
Larrazabal Bidaurrázaga, nacido en Las Arenas el 25 de Octubre de
1908
y de María
Luisa Bengoetxea Mentxaca, nacida en Sopelana el 25 de Abril de 1910.
Su casa estaba situada a menos de 100 metros del hoyo 4 del entonces
llamado Real Club de Golf de Neguri, terrenos en los que hoy se ubica
la urbanización Antiguo Golf.
Estudió
en el colegio de Nuestra Señora de los Ángeles, hoy ya desaparecido
(actual Nagusien Etxea de Romo).
Su
padre Angel Larrazabal durante la Guerra de 1936 fue ertzaina
y escolta de José Antonio Aguirre por lo que pasó 5 años en la
cárcel del Puerto de Santa María.
Angel
Larrazabal, “Angelín”
como le llamaban los más allegados, fue profesor del club, era
profesor del Club de Golf de Neguri, el
hoyo 4 de ese club está lleno de historia para la familia
Larrazábal, algunos nacieron cerca de ese green en una casita que
había allí, y empezaron a andar y a jugar en ese mismo hoyo e
incluso a sujetar la bandera mientras su madre pateaba.
Toda
la familia Larrazabal estaba vinculada de una u otra forma a este
deporte, de manera que, aunque en aquella época el golf era una
afición mayoritariamente masculina, Elvira mostró desde muy joven
una habilidad innata para el mismo, fomentada por un padre que veía
en ella grandes cualidades y facilitando su práctica el ambiente
familiar en el que se desenvolvía.
El
padre de Elvira murió el
25 de julio de 1958
con tan solo 49 años, aquel día el campo de golf cerró sus puertas
como sentido homenaje a su figura.
Elvira
empieza a jugar a los 16 años, dedicaba 8 y 9 horas diarias al
entrenamiento, a los 18 años, gana su primer campeonato del estado,
una hazaña, dado que comienza su andadura con 14 palos de 9 juegos
diferentes y además como las bolas escasean, su padre las reciclaba
para ella. Cuando esas bolas estaban un poco rajadas, Angel le decía
a su hija “Mira tiene una sonrisa” y con una vela la derretía y
arreglaba “la sonrisa” y ya valían para jugar. El quería
enseñar bien a su hija, sin embargo no le ponía las cosas fáciles.
Cuando tocaba clase de bunker….él enterraba bien la bola para que
ella supiera que esas cosas pasaban.
Fue
una mujer de récords, durante cinco años consecutivos, no perdió
ni un torneo de los que asistió, cinco años campeona de Bizkaia,
cuatro del estado y 3 triunfó en el circuito internacional.
En
el palmares de Elvira Larrazábal cabe anotar que fue campeona del
estado consecutivamente en los años 52, 53, 54 y 55 y subcampeona en
el 56. Ganadora del campeonato internacional amateur del estado en el
53 y 54 y además ostenta, todavía, un récord hasta ahora imbatido,
ganó todos los campeonatos que jugó entre el 52 y el 55. Los
campeonatos del estado los ganó en Pedreña y en Neguri, su club,
todos los campeonatos de Bizkaia.
El
28 de Abril de 1954, en un diario Madrileño de gran difusión salia
la siguiente noticia relacionada con Elvira -“Elvira Larrazabal
gana el Campeonato Amateur de Golf de España”-, campeonato que
gano por 2 up en Madrid, y el 18 de Agosto del mismo año, -“la
señorita Elvira Larrazabal ha revalidado su titulo de campeona de
España de Golf al triunfar plenamente con 154 golpes en los 36
agujeros”-, este campeonato de celebro en el campo de Golf de
Pedreña (Cantabria).
En
la organización de uno de esos eventos conoció a su marido, José
Mª Ortiz de Mendibil Monasterio, nacido en Portugalete el 11 de
agosto de 1926,
que fue durante años árbitro internacional de reconocido prestigio.
José
Mª y Elvira se casaron el 5 de Mayo de 1955 en
la parroquia de San José Obrero de Romo,
tuvieron tres hijos Peru, Iñigo y Carmen. Cuando su hijo mayor tenía
apenas un mes Elvira participó en alguno de aquellos campeonatos a
los que era asidua.
En el año 58 deja el
mundo amateur y es cuando obtiene la primera licencia de profesional
dada por la Federación de Golf a una mujer y su carrera la orienta
hacia la enseñanza siguiendo los pasos de su padre, cosa que a él
le hacía mucha ilusión, lo cierto es que si se hubiera dedicado al
juego puro y duro, dado el potencial que tenía, ¿lo que habría
conseguido esta señora?.
En
1958 se hizo profesional. En su curriculum se anota el hecho de que
se convirtió en la primera mujer profesional del golf del estado.
Comenzó a impartir clases, tenia el carnet Nº 61 que aun conserva,
primero en el Antiguo Golf de Neguri y más tarde en La Galea.
En
1965 Elvira abandonó el golf para dedicarse íntegramente a su
cuidado su hija Carmen. El abandono fue tan drástico que retiró de
su casa todos los objetos relacionados con el Deporte.
Durante
14 años, su vida estuvo centrada en el cuidado de su familia y
particularmente en el de Carmen. Por ella se vinculó a Asociaciones
de Voluntariado que aspiraban y siguen aspirando a la
integración-normalización social y vital de personas con
minusvalías. Tras este período de inactividad deportiva, animada
por familia y amigos, volvió a ilusionarse y empezó a jugar de
nuevo, pero ya por puro placer y diversión, retirada de la
competición oficial. Manteniendo una gran buena amistad con grandes
figuras del golf y muy especialmente con Severiano Ballesteros.
Otra
de sus aficiones ha sido el patinaje sobre hielo, que practicaba
cuando podía en las pistas de Nogaro. Sus hijos Peru e Iñigo,
también deportistas, han sido jugadores y asimismo árbitros de
hockey sobre hielo.
En
el año 2006 sufrió un infarto cerebral, probablemente el tesón y
la disciplina que la forjaron como deportista tuvieron mucho que ver
su recuperación. Cuando la ingresaron en el Hospital de Gorliz y fue
consciente de su estado, decidió que su rehabilitación sería un
reto e hizo todo lo posible y hasta lo imposible para valerse por sí
misma, convirtiéndose en ejemplo de los restantes enfermos y dejando
muy impresionados a los médicos.
Su
familia la respaldó activamente para que su fortaleza no quebrara.
El espíritu deportivo que siempre reinó en su casa jugó un papel
importantísimo.
En
el año 2010 el Ayuntamiento de Getxo reconoció su trayectoria en
los Premios del Deporte que se organizan en Fadura, haciéndole
entrega del Molino de Aixerrota de plata.
Elvira
fue la gran referencia del golf femenino de una época y un
gran ejemplo como deportista y persona.
Y entre los maestros de golf es recordado como profesional y persona
su padre Angel Larrazabal.
Deseo agardecer
a su hijo Peru la ayuda prestada para poder realizar esta entrada.
Otro de tus reportajes o posts de tu Blog que se convierten en estrella, amigo mío. Un abrazo.
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