viernes, 7 de junio de 2013

LAS ESCUELAS DE BARRIADA


La primera tentativa para la creación de las Escuelas de Barriada surge hacia 1896, el progreso económico, la prosperidad de los núcleos mas importantes de población, era considerada como satisfactoria, no obstante las zonas rurales y zonas mas deprimidas económicamente no disfrutaban de esa calidad en las enseñanza, debido a la falta de escuelas y a la diseminación de los caseríos.

Entre 1896 y 1911 se suceden mociones para la mejora de las condiciones de la enseñanza en esas zonas, mociones que finalmente tomarían cuerpo, de mano de la Diputación.

El 26 de noviembre de 1919 se aprobaría la “Moción Gallano”, (Juan Gallano Bengoechea navarro nacido en Bera de Bidasoa, quien siendo Diputado Provincial de Bizkaia presentó la moción que dio lugar a la creación de las Escuelas de Barriada).

Con la creación de las escuelas de barriada, la educación experimento un gran avance, la mismas constituyeron una obra, destinada a reducir los altos niveles de analfabetismo y corregir los desajustes educativo-culturales de Bizkaia, sobre todo en las zonas rurales y los barrios minero-industriales.

Será bajo la inspección de Luis de Eleizalde, natural de Bergara (1878-1923), cuando la Diputación de Bizkaia presidida por Ramón de la Sota Aburto, quien le nombraría inspector de Enseñanza Provincial, cuando se organizaron las Escuelas de Barriada, que comenzaron a ponerse en marcha en 1920.


Fue el propio Eleizalde quien dio vida a las mismas y se le puede considerar el iniciador de la educación bilingüe, se organizan en dos modalidades: A) zona vascófona, B) zona castellano parlante.

Su finalidad era ajustar los niveles de educación, a los alcanzados en Europa, dar una educación adecuada para el nivel de vida de comienzos del siglo XX, y bajar las altas tasas de analfabetismo de la población.

Otra finalidad de estas escuelas fue la enseñanza en euskera, rápidamente se editaron los primeros libros, incluso el catecismo fue enseñado en euskera.

El triunfo de la Liga Monarquica en 1922 impide avanzar en la aplicación de la enseñanza en euskara en las escuelas de barriada de Bizkaia.

El 5 de Diciembre de 1930 la Diputación de Bizkaia sacaba a concurso, publicándolo en el Boletín Oficial de la Provincia, la concesión de diez escuelas de barriada.

Aquellas escuelas respondían a un acuerdo de la Diputación de Bizkaia del 4 de Mayo de 1920, y tenían como objetivo suplir decían “...la deficiencia de instrucción , que causa de la especial distribución de la población...”, con la creación de centros de instrucción primaria en barridas, estuvieran o no enclavadas dentro del termino municipal, y que distaran de la Escuela mas próxima un kilómetro y contaran con un mínimo de 10 niños. Las mismas debían de ajustarse a las normas de uniformidad en la construcción de edificios educativos de la Diputación de Bizkaia.

El Consistorio de Getxo el 11 de Diciembre de 1930, tras haber tenido conocimiento de las condiciones que dicho Boletín establecía, entre ellas la de tener que soportar todas las cargas del coste y mantenimiento del edificio, y teniendo prevista la necesidad de ampliar los centros educativos del Municipio, concretamente en el barrio de Andra Mari (Getxo), en la barriada rural de Saratxaga, como ayuda a las Escuelas Nacionales de Andra Mari, acordaba por unanimidad obtener el Reglamento por el que se regían las escuelas de barriada.

Las normas que establecía aquel reglamento hablaban de del Objeto de las mismas, de las Juntas locales de inspección, de los Locales escolares, del Personal docente y del propio Régimen escolar.


Por aquella norma se concedía la asistencia gratuita a los niños que habitaran en el radio de acción de aquellas escuelas; así mientras que el Ayuntamiento era el responsable de la construcción del centro, la Diputación se reservaba la potestad sobre creación, distribución, organización y administración de las escuelas a través de la Junta de Instrucción Publica, en cada municipio a su ves se creaba una Junta Local, formada por el Alcalde, Párroco, Medico local y tres padres (se daba preferencia en la elección a los padres que supieran leer y escribir).

El personal docente se elegía mediante oposición pública, debiendo de tener el titulo de Maestro de primera enseñanza, se concedía prioridad para la ocupación de aquellas plazas a los naturales de Bizkaia, seguidos de los del resto de las provincias “Vascongadas y Navarra”; se clasificaban dichas escuelas en dos categorías la de zona euskaldun y de castellano hablantes, las escuelas se clasificaban en mixtas, unitarias y especiales.

Para tener acceso a la escuela euskaldun era preceptivo el conocimiento del dialecto bizkaino, que se debía acreditar mediante un examen; el cargo de maestro de barriada era incompatible con cualquier otro destino publico, retribuido o gratuito, que impidiera o dificultase el desempeño de su misión.

Los alumnos disponían de un carnet escolar en el que se indicaban todos sus datos, registro pedagógico y exámenes finales, que debía ser mostrado por el alumno a sus padres, y después de firmado por estos, devuelto al centro escolar; quedaban proscritos los castigos corporales, lo que se consideraba una falta grave; se creaba un “Museo Escolar”, en cada centro, que estaba formado por los hallazgos realizados por los alumnos en las excursiones escolares.

En aquellas escuelas se creaba la figura de la “Cantina Escolar”, para todos aquellos niños que por la distancia a los domicilios, aconsejara comer en el centro, la condimentación de los alimentos se realizaba por la maestra y con la ayuda de las alumnas del curso superior. Los niños debían llevar un blusón, decían que como base para la implantación del “Ropero Escolar”.

En las Escuelas Nacionales de Getxo, las mas próximas a las antiguas vías del ferrocarril, en 1931 el cuadro de profesores estaba encabezado por Margarita Landaida y Claudio Garcia Iztueta. En las de Saratxaga lo componían Rosario Larrinaga, Gregoria Zubia y Marcelo Urtasun que provenía de la Escuela Normal de Maestros de Navarra y que entre los años 1927-1928 ejercio como tal en las escuelas de Huici y Alcoz (Nafarroa).

 
El examen para la provisión de plazas para las escuelas de Saratxaga se realizaron el 1 de Octubre de 1932, estando compuesto el tribunal por Bonifacio de Aretxabala, Juan de Gorostiaga y Emilio Albizu, los ejercicios consistieron en la lectura, traducción y analisis de las primeras veinte lineas del cuento “Benetako Aldizkidia” de Joseba Altuna, en la escritura al dictado de las ocho primeras lineas de “Itzaurrea” del libro de Sabin Euskalduna, y la lección tercera consistiría en la conversación sobre el tema “Jarduketerea”, el tribunal consideró que el nivel de los aspirantes era bueno, aunque al ser las plazas de carácter interino, se les volviera a examinar mas adelante, para la plena posesión de las plazas.

El acta de posesión de firmó el 3 de Octubre de 1932, siéndoles concedido la propiedad de las plazas el 13 de Diciembre de 1933.

Hasta aquí una pequeña historia de aquellas “Escuelas de Barriada”, que en Getxo se construirían en el barrio de Saratxaga, iniciando su andadura el 1 de Octubre de 1932, que en aquellas fechas contaba con un censo de 72 niños y 80 niñas, de los cuales 37 niños y 36 niñas, venían asistiendo a las de Santa Maria, escuela a su vez que tenia un censo total de 300 alumnos.

3 comentarios:

  1. enhorabuena de nuevo, oso interesgarria!!!!!
    Sarriko Basoa

    ResponderEliminar
  2. Poco se cuenta del adoctrinamiento de los niños con el canto del cara al sol antes de comenzar las clases por la mañana y delante de la enseña nacional. Así como del desarrollo de la memoria persuasiva mediante la religión.Doctrinas que se cultivaban en las escuelas nacionales.

    ResponderEliminar
  3. Estimado Sr.:
    Sobre las Escuelas de Barriada.
    D. Juan Gallano no era de Vera de Bidasoa. Nació en Amoerbieta. Yo soy su nieto y lo puedo certificar. Él tenía una casa de vacaciones, una "residencia secundaria" en vera, pues la familia de su mujer era de Vera. Pero él nació en Amorebieta.
    A propósito, no sé el nombre de Vd.
    Atentamente:
    Miguel Rotaeche Gallano

    ResponderEliminar