Romo
es un barrio de Getxo con identidad propia, siempre se ha
caracterizado por su sociabilidad, en todos sus ambitos, los vecinos
de Romo, desde los comienzos de este populoso barrio, se han juntado
para dar salida a sus inquietudes.
Uno
de estos colectivos es una agrupación de mujeres “GIZARTIAR”,
su nacimiento se produce en 1.995, la motivación fue el fatal final
de dos vecinas de Romo, que decidieron poner fin a algo tan preciado
como su existencia, a raiz de estos luctuosos hechos, surgió la
necesidad de crear un espació para las mujeres de Romo, tienen un
Bolg muy interesante su dirección es http://gizatiar.org/ .
El
trabajo de esta asociación es reconocido por diversos organismos
oficiales Ayuntamiento Getxo, Emakunde, Diputación de Bizkaia y
otros organismos de Euskadi.
Pero
las mujeres de Romo, tambien mantienen una estrecha relación entre
ellas, y para dar rienda a la misma, en el año 1993, celebraron la
que seria la primera comida de mujeres del barrio, en ella que se
juntaron mas de 200.
El
día amanecio lleno de promesas, la acera frente a la Iglesia de
Romo, estaba tomada por una flota de autobuses, los abrazos se
sucedian, viejas amigas que despues de mucho tiempo volvian a verse,
ya dentro del autobus, las risas y las voces de alegria se sucedian.
El
desembarco en Morga fue antologico, nunca habian visto tantas
mujeres juntas, poco a poco fueron entrando en el Katxi, ocupando las
innumerables mesas, practicamente llenaron los comedores, mientras
los camareros se aprestaban a atenderles, seguro que a alguno le
sudaban las manos, pensando en lo que se les venia encima, las
conversaciones y las risas eran interminables, las viejas fotografias
en blanco y negro, de su juventud, corrian de mano en mano, se
mezclaba la alegria de verse nuevamente con la de recordar viejos
tiempos.
La
comida transcurrio en un ambiente de gran camaraderia, en los
entreplatos las visitas a otras mesas se sucedian, tratando de
saludar a otras amigas, la mas previsora, llevo una camara de video,
fue pasando mesa por mesa, grabando aquellas imagenes irrepetibles,
la alegria poco a poco iba desbordando el local, con la primera copa
de campan, comenzaron las canciones, y comenzaron los bailes, algunas
a dar rienda suelta a aquellos años de aprendizaje en el grupo de
dantza Zasi Eskola, se notaba la habilidad de aquellas que habian
participado en el grupo.
Pasaron
un dia de lo mas animado, en muchos casos supuso, volverse a ver
amigas de la infancia, el encuentro fue tan placentero, que acordaron
volver a repetirlo anualmente, hoy casi 20 años despues, aunque
faltaran algunas, volveran a reunirse, como siempre, el ultimo sabado
del mes de Noviembre.
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