He
recibido unas explendidas fotografias de las inundaciones de Romo,
pertenecen a las del año 1.977, en la primera de ellas (ver foto
superior), se puede apreciar los destrozos que pudieron causar, las
aguas anegaban todos los bajos, tambien se pueden ver algunos
edificios hoy desaparecidos, en primer lugar y a la derecha, las
casas que estaban a continuación de la “Cooperativa de los
Ferroviarios” (la casa de Murga), asi como las
embarcaciones transitando por la calle Santa Eugenia.
En
la siguiente puede apreciarse como los txintxorros cruzaban las
barreras del ferrocarril sin miedo a ser arrollados por el mismo (ver
foto inferior).
En
la tercera se ve como los voluntarios, en su mayoria jovenes, ayudan
a los vecinos de la calle Ibaiondo, que habian quedado aislados por la crecida del rio
Gobela, a salir de sus casas (ver foto inferior).
En
la cuarta se puede apreciar desde la calle Eduardo Coste, que las
aguas llegaban casi hasta la calle Amaya, al fondo se aprecia la
Benedicta y los Altos Hornos (ver foto inferior).
En
la quinta se ve cruzar las vias a unos esforzados vecinos que
ayudaron a llevar alimentos y medicinas a mas de una familia (ver
foto inferior).
En
la sexta se puede apreciar la fueza del viento en aquel triste día,
un tilo aparece derribado sobre el paseo de Zugatzarte (ver foto
inferior).
Deseo
agradecer a Guido Klein-Weiss, que ha sido quien me ha
proporcionado estas imagenes, su colaboración para recuperar parte
de la historia grafica de nuestro pueblo, muchas fotografias
desparecieron en los bajos de las viviendas inundadas, pero seguro
que otras yacen olvidadas en los cajones de mas de una casa,
iniciativas como la de Guido, ayudan a recuperarlas para la memoria
colectiva, animo a todos a hacer aflorar esas imagenes que si no se
terminaran perdiendo.
Gracias Karla! Es un placer poder contribuir con algunas fotos a tus crónicas del pasado y del presente que tanto nos encantan a los que ya no estamos a diario por allí, paseando por nuestro barrio en Getxo, Algorta, Areeta, Romo etc.
ResponderEliminarLa suerte era en quel entonces, tener una motoneta (que me regaló mi hermano mayor) y una cámara (que me prestaba mi padre) - dos requisitos indispensables para hacer una vida sin muchos otros vicios. La gasolina y los carretes se comian mi paga de 500 pts. mensuales, aunque gracias a Dios en Foto Uribe y Foto Ricardo me daban las peliculas de B&N caducadas a mitad de precio y las revelaba yo mismo en casa, como parte de ese hobby que sigo disfrutando hasta hoy.
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