Todo
comenzó el 28 de diciembre de 1.895, en el 14 del bulevar de las
Capuchinas de París, cuando los hermanos Lumière, colocaron un
rótulo encima de la puerta, por la que se bajaba al sótano, “Le
cinematographe Lumière, entrada un franco”.
Uno
de los prioneros del cinematografo en Bizkaia fue Gregorio Antonino
María Sagarmínaga y Aberasturi, empresario bilbaíno dedicado a la
minería, quien a finales de los años 80 del siglo XIX, adquirió
una “linterna mágica” y varias placas con las que
organizaba proyecciones en la “Sociedad Cultural El Sitio”
en Bilbao.
En
1.897, apenas dos años después de la aparición del cine, compra un
proyector con el que organiza sesiones cinematográficas en la dicha
sociedad cultural, su interés por esta actividad no decaeria hasta
el 1.906, momento en que, instaurado el sistema de alquiler de
copias, se le haria imposible seguir comprándolas para sus
proyecciones.
La
llegada oficial del primer cinematografo a Bizkaia se produce en
1.897, concretamente el 31 de Mayo, y lo hace a la capital de la
provincia en Bilbao, dos años antes habia hecho su primera
presentación en Paris, y un poco antes en Gasteiz y Donosti.
Bilbao
contaba a comienzos de los años veinte con cinco salas de
proyección, el Salón Olimpia, Salón Vizcaya, Teatro Trueba, Salón
Gayarre y Coliseo Albia a los que se sumaban las sesiones de cine
ofrecían regularmente el Teatro Arriaga y el Teatro Campos Elíseos.
La
notable asistencia a las mismas provocó que la cartelera
cinematográfica aumentara de nuevo, entre 1.923 y 1.926, con la
apertura de cuatro salas más, el Cinema Bilbao (1.923), Cinema Pax
(1.924), Cine Teatro Buenos Aires (1.925) y el Ideal Cinema (1.926).
Este
progreso constante, que experimentaba aquel incipiente espectáculo,
que fue el cinematografo, en Bilbao y en el resto del territorio
histórico, tuvo también su plasmación en las páginas de los
rotativos semanales, en las que la prensa escrita comenzó a dedicar
espacio a la actividad cinematográfica.
El
primer rotativo en iniciar la publicación de estas secciones fue El
Pueblo Vasco, el 12 de noviembre de 1.921, con la Semana
Cinematográfica, La Tarde (Cinematografía) y El Nervión (Teatros y
Cines), en 1.924; y las de El Liberal (Teatro Mudo) y Excelsior
(Cinematográficas), en 1.926.
Este
artículo lejos de rememorar la llegada del cine a la provincia y de
los artefactos para la proyección de imagenes en movimiento, solo
trata de presentar algunas de aquella caratulas y carteles de mano,
con los que el septimo arte nos deleito durante generaciones, hasta
que la aparición de la TV fue poco a poco vaciando aquellas salas,
en las que generaciones de jovenzuelos habian pataleado, ante la
llegada de los “buenos” en el ultimo momento.
De
esos cines familiares que se inician en Getxo, con la familia
Zamacona en el barrio de Las Arenas, en este barrio surgirian el
(Cine Rosa, Gran Cinema, la Casa Social, Barria), en Romo el (Cine
Arenal), los cines de Algorta (Cervantes, Gran Cinema y Gurea), y
aquellos pequeños cines parroquiales a los que multitud de niños
acudian cada Domingo.
El
Cine Arenal tenia frente a el un pequeño quiosco de chucherias, de
color verde, alli adquiriamos, tebeos, caramelos y algun que otro, a
escondidas, cigarrilo suelto, junto a aquel quiosco, se solia situar
una viejecita de Lamiako, con una pequeña mesa de las de tijera,
sobre la que disponia sus humildes vituallas, caramelos de toffe,
malvavisco, chicles bazooka (Salieron al mercado poco después de la
Segunda Guerra Mundial, en los EE.UU., fueron elaborados por la
compañía Topps de Brooklyn, Nueva York), chufas (la medida solia
ser un vasito pequeño), pepitas de girasol, pan de higo y algun
cigarrillo (los vendia sueltos).
La
entrada de general suponia un desombolso de 6 pesetas, cantidad
importante para aquellos pequeños ahorros, fruto de la “paga”,
que con gran esfuerzo, nuestros mayores, nos daban los fines de
semana.
Estas
cosas forman parte de nuestros recuerdos y de una forma de
relacionarse en el barrio, que como he dicho antes, la Tv se encargó
de eliminar, trayendonos el individualismo a nuestros habitos.
Las
carteleras que hoy traigo a estas paginas son “Lilas
Blancas”
del Germano Hans Deppe, con Romy
Schnieder
y Willy Fritsch; “Miss
Catastrofe”
del Ruso afincado en Paris Dimitri Kirsanoff, con Sofia Desmarets y
Philippe Nicaud; “Crimen
S.A.”
del Newyorkino Sidney Salkow, con Brian Keith y Beverly Garland;
“Nuestras
Hijas”
del Britanico Herbert Wilcox, con Anna Neagle y Sylvia Syms; y
“Sonrisas
y Lagrimas”
del Polaco Wolfgang Liebeneiner interpretada por Ruth Leuwerik y
Hans Holt.
¿Donde estaba el Cine Rosa en Las Arenas?
ResponderEliminarEntre las calles Mayor y Maria Cristina, el día 15 publicare un articulo que empieza el dia anterior, sobre este y los demas cines de Getxo.
ResponderEliminarMuchas gracias, Karla yo te recuerdo de los tiempos en que,por obligación, te tenias que llamar Carlos; me acuerdo tambien de tu hermano Juanillo, y de tu aita Carlos y de tu ama Lola !Que buenas personas eran!. Cuanto me acuerdo de tu aita sentado en la ventana de aquella planta baja donde viviais contando txirenadas y todos los chavales alrededor riendononos. Me haces pasar unos buenos
ResponderEliminarmomentos.
José Luis Alday Ugalde
Ezkerrik Asko Jose Luis por el recurdo de mis Aitas.
ResponderEliminar