LA PANADERÍA DE HILARIA MOJAS

La panadería de Mojas estaba en la Algortako Etorbidea (Avenida de Algorta), tenía acceso el lateral por el hoy Bar “Ekia” (plaza de Satistegi). Estaba regida por Hilaria Mojas. Trabajaban entre otras, Mari y Rita Guinea, hijas de Gabriel Guinea, Jefe de estación en Algorta. A la izquierda de la instantánea se puede apreciar las ventanas del actual Bar “Etxetxu”. 

 

Si se observa la fotografía de 1928, junto al camión de reparto, se pueden observar los productos de aquel obrador: enormes hogazas y panes distribuidos en grandes cestos de mimbre. En la fotografía apreciamos a algunas de las empleadas de la panadería, con largos vestidos negros e inmaculados delantales blancos. Entre ellas la cuarta de la fila de arriba, de izquierda a derecha es Rita Guinea; debajo de ella (una niña) Maria Angeles Lores (sobrina de Rita); la quinta por arriba era apodada “La Paragüera”. 

 

La instantánea nos da una idea de la escasa circulación, que en aquellos tiempos recorría las calles de Algorta. El camión de reparto posaba plácidamente, junto a los repartidores en medio de la carretera. Por otro lado nos da una idea de los trabajadores que se requerían para la elaboración de aquel complemento alimentario, que no debía faltar en los hogares, y que, al revés de los actuales panes “chicle”, duraban una semana. Aquellos oficios que requerían de mucha mano de obra, vendrían a ser sustituidos, amortizándola, por las maquinas. 

 

Sirva esta pequeña entrada para recoger uno de los gremios que durante años sirvió ese necesario alimento a nuestras casas, y que junto a otros obradores hoy desaparecidos, realizaban aquellos exquisitos productos, que más tarde, durante la escasez de los años 40-50, servirían para las meriendas de cantidad de niños, aquellos bocatas de pan con aceite y azúcar o de nata (de la cocción de la leche) con azúcar, incluso para albergar la triste onza de chocolate.