La
anterior entrada finalizaba con el regreso del Habana escoltado por
un destructor británico a Santurtzi.
El
1 de junio de 1937, el Habana salió de Santurce con 3.728
evacuados bajo protección del Royal Oak y dos destructores. Llegaba
a La Pallice el día 2. Regresó a Santurce el día 4 escoltado por
el Resolution y un destructor.
El
día 2 de junio, el secretario de Asistencia Social del Gobierno de
Euzkadi convocó a los familiares de los evacuados para informarles
que de su situación: “...hasta altas horas de la madrugada
había estado a bordo del trasatlántico “Habana”, presenciando
las operaciones de embarque. Los niños que marchan a Francia fueron
Instalados en camarotes de primera clase y de preferencia, todos
ellos iban muy contentos. El barco salió de Santurce a las cinco de
la mañana, y una hora después abandonaba las aguas de Vizcaya con
rumbo a Francia, escoltado por nuestros destroyers...”. Ese
mismo día se anunció la llegada a La Rochelle del buque “Habana”
con 3.000 refugiados vascos. El gobierno de Euskadi publicó en la
primera plana del diario “El Liberal” la lista de
evacuación de la población civil. A través de unos tickets de
color crema se establecían los lugares de concentración para el
ulterior embarque para los 4.000 agraciados. Los 1.250 primeros lo
hicieron en el Deposito Franco, los 1.300 siguientes se concentraron
en el teatro Buenos Aires y los siguientes 1.500 lo iban a hacer
frente al Teatro Trueba. La salida estaba prevista desde Santurtzi.
El
5 de junio de 1937 el Goizeko-Izarra, convertido en el yate
inglés Warrior, volvía a Santurce.
El
6 de junio de 1937 el Habana vuelve a salir con 4.251
refugiados en dirección a La Pallice. Le escolta el Císcar hasta
las tres millas jurisdiccionales, siendo acompañado posteriormente
por el acorazado Resolution y un destructor. Regresó a Santurce el
día 9 de junio.
El
día 7 de junio de 1937 se anuncia en la prensa la llegada a Francia
de 5.000 refugiados que habían viajado en el “Habana”,
indicándose que el jueves lo harían otros 4.000 más. Estos iban a
viajar en el “Goizeko Izarra”. Se trató de la
primera expedición de niños enfermos del “Sanatorio de
Górliz” que iban a ser acogidos en Saint Cristeaux, una
finca situada en pleno Pirineo, cerca de Oleron, a 108 kilómetros de
Bayona. Con ellos se trasladó todo el personal médico, enfermeras y
monjas que venían atendiendo a los enfermos, así como el material
completo de cura existente en dicho sanatorio. Se recibieron noticias
sobre los niños refugiados en la colonia infantil de “Mas
Eloi” (Limoges), a los que acompañaron los profesores D.
Manuel Sanz y D. José Las Heras Miguel. Daban cuenta de que los
niños seguían disfrutando de excelente salud. Mientras, se luchaba
en los frentes del norte, en Peña Lemona, Gondramendi, Jata, Alava y
Burgos. El
diario “La Tarde”, en su sexta pagina, escribía
con grandes titulares “Bilbao en pie de Guerra”, y
no era para menos, las sirenas avisaban a los vecinos de la llegada a
los cielos de Bilbao de bombarderos alemanes, que dejaron caer su
mortífera carga sobre un Galdácano en fiestas, Lemoa, Bedia y
Usansolo y las defensas de Bilbao. Mientras, los ayuntamientos de
Zornotza, Meñaka, Mundaka, Gamiz-Fika, Mungia, Bermeo y Durango eran
evacuados. El mismo diario titulaba: “...A juicio del Cónsul
de Inglaterra, la barbarie de los aviadores fascistas supera por su
saña y encono a las que presenció durante la Guerra Europea...”
Al menos desde otros lares llegaban “buenas noticias”,
acababan de desembarcar en el puerto de La Rochelle en “La
Pallise”, los 4.000 niños bilbaínos a bordo del “Goizeko
Izarra”. Cualquier lugar era bueno para alojarlos: en los
corredores del paquebote, en los salones, los dormitorios, todo el
barco aparecía cubierto de mantas de viaje y maletas. Los acasos más
sangrantes eran: “...Los 300 pequeños que habían perdido a
sus padres en bombardeos o fusilados por los fascistas. Durante todo
la travesía, muchos, no dejaron de llorar reclamando la presencia de
su madre....”. Fueron convoyados por unos destroyers
ingleses. Habían salido de Santurce al amanecer de la jornada
anterior y llegaban a las siete de la mañana del siguiente día a la
rada del puerto francés. En el hall de la estación marítima,
transformado en refectorio, los niños evacuados hicieron honor al
menú que les sirvieron: “...sobre todo sus ojos se
enamoraban del pan blanco y la leche, llevaban semanas privados de
ella...”.
El
día 8 de junio de 1937 llegaron noticias sobre la localidad inglesa
a la que habían sido trasladados los niños del “Habana”.
Los cuatro mil niños vascos que se encontraban en un lugar llamado
Stoneham, a unos siete kilómetros de la ciudad de Southampton, en la
costa sudoeste de Inglaterra, a hora y media de tren de Londres. Era
una ciudad de grandes y abundantes parques. Aquellos pequeños,
estaban poco habituados a la presencia de aviones, salvo los
facciosos que bombardeaban sus lugares de origen. El campamento se
hallaba cercado por una alambrada, ocupaba una superficie de un
kilómetro cuadrado, parecía sembrado por blancas tiendas de
campaña. Estaban próximos a un aeródromo: “...La primera
vez que vieron un aeroplano sobre ellos corrieron a refugiarse en las
tiendas de campaña...”. A medida que iban adquiriendo
confianza, cuando sonaban los motores, levantando la cabeza
exclamaban !Estos no van a Bilbao!. Contaban como anécdota
que en cierta ocasión, a la hora de la comida: “...los
encargados decidieron colocar a cada niño una cinta de color, a
manera de brazalete, para distinguir a los de un grupo de tiendas de
los de otro. A unos les pusieron una cinta verde y otra roja, a otros
una cinta verde y otra amarilla, y a otros una amarilla y otra roja,
los pequeños gritaban: !Esta es la bandera de Franco!...”
El
diario “Lucha de Clases” informó sobre una carta
de Ms. Leah Manning enviada desde Southampton y fechada el 28 de
mayo, informando sobre la recepción y el estado de salud de los
niños. Describía el viaje como: “...muy agitado debido a
las condiciones de la mar en el Golfo de Bizkaia; los niños fueron
nuevamente examinados a su llegada, todos ellos estaban en perfecto
estado de salud. El recibimiento fue muy caluroso, las calles estaban
adornadas con colgaduras, que habían servido para celebrar la
coronación, gracias a un permiso especial expedido por el alcalde de
la ciudad. Los más pequeños fueron conducidos a un campamento
preparado para 250 niños y cuidado por jóvenes exploradoras. Los
niños estaban agrupados en tiendas de campaña de ocho por tienda,
acompañados de un maestro y un auxiliar por cada cuatro tiendas.
Cuatrocientos de los niños fueron trasladados a una colonia en
Clapton (Londres), a lo largo de la semana estaba previsto enviar a
algunos al campo de Stoneham...”
El
día 9 de junio de 1937, se anunció que el traslado de los niños
que iban a ser conducidos a Francia y a la U.R.S.S. se iba a efectuar
al día siguiente. El mismo se iba a realizar en ferrocarril desde La
Naja, empezando por los trasladados a Francia. Estos iban en cinco
trenes que empezaron a salir a partir de las seis de la tarde en
intervalos de media hora. En total embarcaron 3.000 niños y 90
adultos como personal auxiliar. Los destinados a la U.R.S.S., en tres
trenes, tenían sus salidas desde Bilbao a las ocho y media de la
noche con la misma frecuencia que los anteriores, embarcando 1.745
niños. Les acompañaban 75 adultos como personal auxiliar. Los niños
y el personal auxiliar debían llevar distintivos para el embarque.
Se recomendaba que fueran merendados o cenados, debido a la hora de
embarque. El barco que realizó esa travesía fue el “Habana”.
La prensa local decía: “...Más de 30.000 niños viven
todavía en Bilbao, hace falta continuar apresurádamente la
evacuación...”.
El
día 10 de junio, el diario “Euzkadi” tituló:
“...Otro día de calma en los frentes Vascos...”,
el obispo de Gasteiz conocedor de que gran numero de niños vascos
estaban siendo evacuados a Bélgica se dirigió al arzobispo de
Manila: “...en emocionante carta a monseñor Van Roey,
suplicaba que hiciera un llamamiento a sus fieles en favor de
nuestros niños...”. La respuesta a esta súplica no se
hizo esperar, el mismo diario informó: “...ha sido leída en
todas las iglesias de Bélgica una pastoral de monseñor Van Roey
excitando la caridad de sus diocesanos para con los niños vascos que
la crueldad de la guerra ha expulsado de sus hogares...”. A
la vez, el Clero Vasco se pronunció ante la vandálica destrucción
de Durango y Gernika por la aviación Alemana “La Legión
Condor” a las ordenes de los sublevados, y la
tergiversación de aquel acto de barbarie por los medios franquistas:
“...El clero vasco, testigo todo él y victimas muchos de sus
miembros de la conducta facciosa en Euzkadi, no podía consentir con
su silencio a que se difundiera por el mundo la infamia según la
cual era obra de las fuerzas vascas la destrucción de Durango y
Gernika...”.
El
departamento de Asistencia Social del Gobierno Vasco hizo llamadas en
la prensa para presentarse en sus oficinas y recoger los cartones
distintivos para los niños que iban a ser trasladados en el “Habana”
a Francia y a la U.R.S.S. Entre ellos estaban los responsables
pedagógicos de aquellos pequeños. En total iban a ser trasladados
3.100 niños. La Federación de Escuelas Vascas hizo llamamientos en
la prensa para informar sobre algunos pequeños. Entre ellos estaba
la vecina de Algorta Balbiñe Lete Larrañaga. Casi todos los días
aparecieron avisos en la prensa de milicianos o personas civiles que
pedían saber sobre el paradero de sus familiares, entre ellos el
diario “Euskadi” con una sección destinada a este
fin. Ese día, entre otros avisos, apareció el de: “...Antonio
Plaza Laka del batallón Saseta, hospital Laiseka de Algorta, desea
saber el paradero de sus hermanos...”.
La
próxima entrada comenzará con otro viaje del ahora
ex-Goizeko-Izarra, que había cambiado su nombre por el de
Warrior.
aunque este post va de otra cosa..veo que sigue coleando el tema de la Humedad-Iturribarri...
ResponderEliminarvisto que nada va a quedar verde (Bolue no lo quiero ni mencionar por si las moscas), sólo nos queda una salida a los getxotarras: tomar al asalto el campo de golf de La Galea!!!!!!
Akabuko landa!!! el último berdegune de Getxo!!!!!
sarriko basoa