domingo, 18 de octubre de 2020

ACONTECERES DEL ÚLTIMO CUARTO DEL SIGLO XIX EN GETXO -181-


En la entrada anterior de esta serie veíamos cómo la Dirección General de Contribuciones trasladaba a la Administración de la Hacienda provincial la orden de que debía repuntarse para los efectos del impuesto, no solo el sueldo, sino cualquier clase de renta ya procediera de bienes o industrias.

 

El día 24 de marzo de 1893 se notificaba en el diario “El Nervión” las exenciones militares para los mozos del reemplazo de abril de ese año, entre ellos estaban los de Getxo: “…Conforme a lo que dispone el artículo 102 de la ley de Reclutamiento militar del próximo mes de Abril comenzaran en el salón del Instituto Vizcaíno, ante la Comisión Provincial la presentación de todos aquellos mozos que a su debido tiempo alegaron las causas y efectos que les impedían acudir al servicio militar. El día señalado para los ayuntamientos de la provincia, són los siguientes: Día-4, concurrirán los comisionados con los respectivos mozos de los Ayuntamientos de: Arrigorriaga, Barrica, Basauri, Begoña, Berango, Deusto, Echevarri; Erandio, Guecho, Laukiniz, Lejona y Lujua…”A la vez que daban el dato de los buques salidos y entrados a Puerto durante el mes de febrero de 1893: “…Han entrado a puerto 254 y salido 285 buques…” El pabellón mayoritario de ambos era de origen Inglés.

 

En el pleno del 29 de marzo de 1893 se trataba, entre otros temas, sobre unos terrenos de la casa llamada “Dominguena” situada en la calle San Nicolás de Algorta: “…Se da cuenta de la evaluación realizada por D. Francisco Ciriaco de Menchaca, maestro de obras, en el terreno de Dña. Carolina Mandaluniz, viuda, en su casa llamada “Domingueana”, que con motivo del ensanche, que con arreglo al plano de población de Algorta debe darse a aquel punto a la calle San Nicolás…” (Ver plano de 1878).

 


En el mismo pleno se aprobaban algunos pagos que por diferentes conceptos se habían realizado, uno de ellos fue: “…A D. Juan Antonio Goicoechea 39 pesetas, por la vigilancia realizada en la casa de D. Santiago Diliz, con motivo de la viruela que reino en esa casa desde el 16 al 28 de diciembre de 1892…”

 

El 30 de marzo de 1893, según informaba el diario “El Noticiero Bilbaíno”, se celebraba en Las Arenas: “…Un gran baile de invitación en honor de la colonia extranjera de esta localidad…” A fin de facilitar los trabajos preparatorios se convocó una reunión general por medio de un anuncio: “…Reunión que tendrá lugar el domingo de Pascua a las 10 de la mañana, la cual se celebrara en el Hotel Ventura. A    la misma se invitaba a asistir a todas las comisiones parciales y a la de los viles a los miembros de la Sociedad Bilbaína, incluso a la prensa local…” El domingo día 2 de abril se celebró aquella reunión, aunque a punto estuvo de ser suspendida por la inclemencia del tiempo la cual a primeras horas hizo que muchos de los asistentes se retrajeran ya que: “...Al extremo de haberse pensado dilatar la reunión a instancias del Sr. Basterra, arquitecto representante de la Sociedad Bilbaína…” Sin embargo, a última hora fueron haciendo acto de presencia varias de las comisiones, la opinión de las mismas era suspender aquella fiesta: “…Deseando dar a este acto toda la brillantez posible, proponemos suspender el baile hasta más entrada la estación primaveral…” La prensa local comentaba que: “…Sabemos que los preparativos son muy importantes, contando para dicha celebración, con unos locales preparados con una completa instalación de luz eléctrica, dotada de una máquina de vapor de fuerza de 10 caballos, con dos dinamos, varias lámparas de arco voltaico de mil voltios cada una, numerosos fuegos de bengala y luces de gas de gran potencia…” La banda de música de Portugalete también asistió al evento y amenizó aquella reunión preparatoria.

 


Para primeros de abril de 1893, se trataba en el pleno del día 6 de dicho mes, se estaba tratando de adoquinar alguna zona de Algorta: “…Se da cuenta de un oficio de la Comisión Provincial autorizando al Ayuntamiento para colocar un paso adoquinado a través de la carretera de Las Arenas a Urduliz, en el punto llamado “La Cadena” en el barrio de Algorta, a la par de la casa de D. Juan Manuel de Ugarte…"

 

En ese mismo pleno se trataba sobre una petición de D. Tomás Uria: “…Deseando dar salida a las aguas sucias de su casa llamada “Mariandresena”, situada en la calle de la Carretera y estando el caño del municipio distante de mi casa 19 metros, solicito el enganche a la red municipal…” El Ayuntamiento, temeroso de que de acceder, otros vecinos en sus mismas circunstancias podían reclamar ese derecho, decidía denegar el enganche por no existir precedentes.

 


En el apartado de pagos se decidía abonar: “…A D. Ignacio Arias 97,97 pesetas por los intereses que debe este Pueblo a la Capellanía de Lecumberri…” Algunos linajes desempeñaron un papel importante en la vida religiosa como patrones de iglesias y poseedores de capillas. La capellanía era una fundación en la que se imponía un número de misas en memoria de su fundador. Este asociaba la capellanía a un capital o unos bienes, los mismos reportaban unos réditos, por lo que era los que determinaban quién sería el capellán.

 

En el pleno del 15 de abril de 1893 se daba cuenta del convenio concertado entre la comisión, nombrada por esta comisión, y Dña. Carolina de Mandaluniz: “…Acuerdo a cerca de la indemnización de parte de la casa llamada Dominguena y su huerta en la calle San Nicolás, esquina a la de Carreras del Castillo, perteneciente a Dña. Carolina de Mandaluniz, que necesita el municipio para el ensanche de la expresada calle…”


Se da cuenta de la evaluación realizada por D. Francisco Ciriaco de Menchaca, maestro de obras, en el terreno de Dña. Carolina Mandaluniz, viuda, en su casa llamada “Dominguena”: “…Que con motivo del ensanche, que con arreglo al plano de población de Algorta debe darse a aquel punto a la calle San Nicolás…”

 

En la próxima entrada, de esta serie, veremos cómo se utilizaban para la beneficencia algunos alimentos y útiles de pesca decomisados por infringir la Ley de Pesca. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario