miércoles, 19 de octubre de 2022

ACONTECERES DEL ÚLTIMO CUARTO DEL SIGLO XIX EN GETXO -293-


En la anterior entrada de esta serie sobre el último cuarto del Siglo XIX, veíamos como se había producido un acontecimiento industrial en la ría bilbaína.

Un suceso poco habitual sucedía en la ría, entre Las Arenas y Portugalete, teniendo como protagonista a nuestro Puente Bizkaia. Contaba la prensa local: “…Ayer al mediodía estuvo a punto de ocurrir una desgracia en la ría, cerca de Portugalete. Regresaba de la pesca a vela, un bote, cuando, a consecuencia de haber parado súbitamente el transbordador del Puente Vizcaya chocó contra el palo del bote y este dio vuelta. El individuo que lo tripulaba pudo salvarse a nado. El bote fue recogido por algunos pescadores, los cuales lo llevaron al puerto…” (“El Noticiero Bilbaíno” del 20 de septiembre de 1895).

Un curioso sistema para predecir la llegada de la lluvia aparecía publicado en uno de los diarios locales: “...Los barómetros del campo.- Los campesinos se pasan muy bien sin barómetros. Para ellos las palomas son los mejores indicadores del tiempo. Cuando se cobijan en el tejado de una granja presentando .el buche al Levante, estad seguros que lloverá al día siguiente, y si acaso no llueve lo hará por la noche. Si vuelven tarde al palomar y si van a comer lejos en la llanura, es señal de buen tiempo. Si vuelven al palomar temprano, si se alimentan en los alrededores de la finca, la lluvia es inminente, …” También la luna era objeto de vaticinio meteorológico: “...También la luna es un excelente barómetro. Si está rodeada de un circulo pálido indica lluvia; si el círculo es rojo, viento; si brilla limpia y luminosa, señal de buen día...” (“Nervión” del 21 de septiembre de 1895).

El domingo día 22 de septiembre, amenizaba por última vez la temporada de verano, en la plazuela de Las Arenas, la banda de Garellano: “...Hoy domingo amenizará por última vez, en esta temporada, en la plaza de Las Arenas, la Banda de Garellano, cedida galantemente por el Coronel D. Manuel Castellón, como obsequio al barrio y a la Comisión de Festejos…” (“El Noticiero Bilbaíno” del 22 de septiembre de 1895).

Y como ya estaba entrando el otoño, las frecuencias del transporte público, el Tranvía Eléctrico de Bilbao a Las Arenas, veían reducir sis horarios: “...La Compañía del Tranvía Eléctrico de Bilbao ha anunciado para su línea de Las Arenas el horario del servicio de otoño, que comenzará a regir el próximo martes 24 del actual. La última salida de Bilbao para Algorta será a las6,30 de la tarde, y de Algorta para Bilbao a las 6,36…” (“El Noticiero Bilbaíno” del 23 de septiembre de 1895).

Una noticia relacionada con los exámenes celebrados en el “Instituto Bilbaíno”, que reproducía un diario bilbaíno, hablaba sobre un centro de Las Arenas: “...El resultado de los exámenes celebrados en el Instituto Vizcaino por los alumnos del Colegio de San Rafael (Las Arenas) dirigido por D. José Arévalo y Jambrina, ha sido satisfactorio, pues han sido calificados con las notas de notables, buenos y aprobados, sin que hayan merecido sus alumnos ningún suspenso…” (“El Noticiero Bilbaíno” del 24 de septiembre de 1895).

En el Colegio se sordo-mudos y ciegos de Deusto, con el cual el Ayuntamiento de Getxo había colaborado con una ayuda económica, al tener ingresados a tres niños, solicitaba una aportación mayor para costear los gastos que su atención precisaba: “...Se dio cuenta de una instancia de la “Junta del Colegio de Sordo-mudos y Ciegos” de Vizcaya de Deusto, participando que en aquel establecimiento están ingresados tres niños sordo-mudos de esta Anteiglesia en concepto de alumnos internos gratuitos por carecer de fondos para el pago de sus pensiones, y esta institución bien solicitando de esa Corporación Municipal alguna cantidad más que la que actualmente subvenciona para pago o alivio de la pensión de los citados niños. Tras un meditada y razonada discusión entre los componentes de esta Corporación Municipal acordamos: Tomar en consideración la pretensión de esa Junta, y desde el próximo 1º de octubre se subvenciones al mencionado Colegio con la cantidad de 500 pesetas anuales, en lugar de las 250 que en la actualidad se vienen abonando…” El Colegio de “Sordo-mudos y Ciegos de Vizcaya” se constituyó en el año 1894 y funcionó como una Institución de Carácter benéfico. Estuvo regida por sacerdotes, su primer reglamento se recogía: “…En el que pueden ingresar gratis cuantos sordo-mudos y ciegos de ambos sexos sean naturales ó residentes en las provincias Vascongadas, y acrediten ser pobres de solemnidad…” Su enseñanza estaba dividida en cuatro periodos: “...Preparatorio, inferior, medio y superior…” En ella, al igual que sucedía en otros centros educativos, el papel asignado a la mujer era “alfabetizarla y adiestrarla en quehaceres domésticos para el mejor funcionamiento del hogar y de la familia”, lo cual se podía ver en la división de al enseñanza en aquel centro: “...Asignaturas para los niños: Física, moral, intelectual (Gramática, matemáticas, historia…), artística e industrial. Mientras que para las niñas se optaba por: En la enseñanza especial de niñas se suprimen la Agricultura, Física e Historia Natural, estudiando en su lugar, nociones teórico-prácticas de Economía doméstica; y además de aprender también las labores propias de su sexo...” (Reglamento del Colegio de Sordo-mudos y Ciegos de Deusto en 1895).

Otro de los Colegios, este si, de Algorta, era el “Colegio San Bernardo”, del que ya hable en mi entrada del 4 de octubre del 2013. Para 1895 el mismo ya había sido adscrito al “Instituto Vizcaino”, y se impartía las asignaturas de náutica. En relación a este asunto y a los exámenes que en el mismo iban a tener lugar, el 26 de septiembre de 1895, se leía en el pleno municipal de Getxo la siguiente instancia: “...Se da cuenta de una instancia de D. Ángel Amunategui , Director del Colegio San Bernardo de Algorta de esta, incorporado al Instituto Vizcaino, solicitando se nombre a un concejal que asista hoy a las tres y media de la tarde a dicho Colegio para la formación del tribunal de exámenes de ingreso para la segunda enseñanza y de náutica. El Ayuntamiento acuerda nombrar al Primer Teniente de Alcalde. D. Juan Libano, quien aceptó su cometido…

El maestro de la Escuela de Algorta ocupaba una habitación en una casa de Algorta: “...Acuerda este Ayuntamiento que se paguen 62,50 pesetas a D. Felipe Landaida, por renta perteneciente al tercer trimestre, de la habitación que tiene arrendada a D. Valentín Cuartango, maestro de la Escuela de Niños de Algorta, y que en lo sucesivo, mientras no se acuerde lo contrario, se entregue a este 250 pesetas anuales en la caja especial de 1ª enseñanza de la Provincia, en compensación de casa y habitación, sin que en nada tenga que intervenir el Ayuntamiento con los propietarios…”

Y por último, en aquel pleno del 26 de septiembre de 1895, acordaban: “...Con el fin de dar una comida, según se acostumbra en esta localidad, al colocar la teja al Hospital Hospicio en construcción, al rematante de la sobras y demás individuos que trabajan y han trabajado en dicho edificio. Acuerda este Ayuntamiento dedicar 350 pesetas

En la próxima entrada de esta serie veremos como se solicitaba la recepción de una fuente colocada en el termino de Amesti.

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