UNA COMIDA EN ONDIZ

En Getxo los nombres de los próceres que alcanzaron popularidad se entrecruzan en acontecimientos de su historia y también, cómo no, en comidas y celebraciones.

Quizá como símbolo y epónimo de esta afirmación anterior, baste con nombrar a dos de los personajes que dieron lugar a grandes modificaciones de nuestro Pueblo, D. Antonio Basagoiti Arteta y D. Evaristo Churruca y Brunet. El primero considerado un benefactor por su actuación ante el Ministerio de Marina para defender el actual diseño de los contramuelles, evitando en 1897 gracias a su intervención, la práctica desaparición de la playa de Ereaga y el Puerto Viejo de Algorta. El segundo por su proyecto del puerto del Abra.

Casi por casualidad y relacionado con ambos protagonistas ha llegado a mis manos una fotografía de uno de esos hechos acontecidos en 1896, a los que me refería al comienzo de esta entrada, una comida multitudinaria celebrada en Ondiz (Leioa). Fue en homenaje a D. Antonio Basagoiti Arteta. Pero es que la fotografía me ha sido enviada por uno de los biznietos de D. Evaristo Churruca y Brunet.

Como decía líneas arriba, D. Antonio Basagoiti Arteta hijo de marino, nacido en Algorta el 22 de octubre de 1849, intercedió ante el Ministerio de Marina para defender la solución de los muelles propuesta por D. Evaristo Churruca y Brunet en lugar de la que estudiaba Obras Públicas de Bizkaia, que en la práctica hubiera supuesto la desaparición de la playa de Ereaga y el Puerto Viejo de Algorta. Ello dio lugar que una de las vías más importantes de Algorta que a lo largo de su historia tuvo diferentes nombres: Calzada, Tetuán, Mayor y la que finalmente llevará su nombre: Avenida Basagoiti (1899).

Junto a aquella fotografía aparecía un texto manuscrito, de autor desconocido, sobre el motivo de la comida que decía: “...Comida a Dn. Antonio Basagoiti Arteta por el pueblo de Guecho, al conseguir del Gobierno, el proyecto de Dn. Evaristo Churruca, sin las modificaciones de la Jefatura de Vizcaya que hacían desaparecer la playa de Ereaga y el puerto Viejo de pescadores. El Ayuntamiento cambió de nombre la calle de Tetuán por Avenida de Basagoiti. Basagoiti era el presidente de la “Unión Patriótica” en México que prestó gran ayuda al ejército español en la guerra de Cuba, con donativos de de víveres, ganado y costeando pequeños cruceros al Río de la Plata y por cuyo motivo tenía gran relación con elementos del Gobierno y el Ejército...” Así que tras buscar en archivos y hemerotecas, paso a describir como fue aquella celebración.

A decir de la prensa, “El Noticiero Bilbaíno” y “El Nervión” de 1986, dicha comida fue ofrecida como despedida de D. Antonio Basagoiti que partía hacia México. La primera rotativa, el día 9 de octubre de ese año la titulaba “La Fiesta de Ondiz”: “...Nuestro paisano Dn. Antonio de Basagoiti con motivo de su próximo regreso a Méjico, obsequió ayer con un banquete a sus numerosos amigos de Algorta y Bilbao...” Seguía el diario relatando: “…Los invitados se reunieron a las diez de la mañana en la Casa Consistorial de Algorta, y desde allí, a los acordes de la marcha de “Cádiz”, ejecutada por la banda municipal, se dirigieron a la estación, donde tomaron el tren que los condujo a Lejona. Desde allí se trasladaron a Ondíz...”

La segunda rotativa “El Nervión”, en la misma fecha, se extendía relatando en el ambiente de la campa de Ondiz: “...Las gaitas, guitarras, bandurrias, violines, los tamborileros del país, las bandas de música de Algorta y Baracaldo, amenizaban el espectáculo con sus acordes...” A la vez que se alegraban de la no presencia de los pianos de manubrio de los que afirmaban: “...Son instrumentos insoportables de sonoridad irresistible...”

A ese acto, según informaban ambos diarios, acudieron más de 150 personas. Las cuales a la hora de la comida se instalaron en un extremo de la campa, protegidos por un toldo que evitaba que los rayos del sol, que aquel día apretaba con fuerza, incomodaran a los asistentes.

Presidía la mesa el señor Basagoiti, quien tenía a su derecha e izquierda a los alcaldes de Getxo y Lejona D. Santiago Diliz y Ara y Sr. Aristi. En la mesa presidencial tomaron también asiento D. Evaristo Churruca, el diputado provincial Sr. Arrola y el director de la Delta Dn. José Manzano. La comida servida por Dña. Josefa Uribe, propietaria de la Fonda San Ignacio de Algorta, cuentan que fue esplendida.

Como era habitual a los postres llegó la hora de las alabanzas y las complacencias, en la que tomaron la palabra el creador del Puente Bizkaia D. Alberto Palacios, el homenajeado D. Antonio Basagoiti, el diseñador del proyecto del Puerto del Abra D. Evaristo Churruca. Terminado el banquete, tras los brindis, el homenajeado dispuso que todos los invitados fuesen retratados en un grupo.

Y es precisamente esa fotografía, que incluyo en el encabezamiento, la que dejó inmortalizado el fotógrafo bilbaíno D. Alejo de Guerequiz, quien sacó varias instantáneas del homenaje. En la otra fotografía, rodeado por un círculo rojo se puede ver al otro personaje: D. Evaristo Churruca.

Tras la fotografía la fiesta continuó con una animada romería que colapsó la campa. En ella el veterano diputado Sr. Arrola y el Alcalde de Leioa bailaron un aurresku y fueron sacadas al centro de la campa las hermanas del Sr. Basagoiti. Mientras, las bandas de música de Algorta, Baracaldo y los tamborileros de Leioa, amenizaban la fiesta. Terminada la romería el homenajeado y los invitados retornaron a Algorta en un tren especial.

Desearía agradecer a Santiago Churruca la amabilidad que ha tenido al facilitarme las fotografías que acompañan esta entrada a través de las cuales he podido reconstruir esta historia de uno de los próceres de este municipio.