jueves, 7 de diciembre de 2023

DOMINGO AURRECOECHEA (TXOMINTXU)

 


Algunos lugares de nuestra Anteiglesia reciben un nombre popular, por el que son conocidos desde tiempos lejanos, algunos dirían inmemoriales, y que en la actualidad siguen siendo utilizados, tal es así que una zona de Algorta y una de las paradas del Autobús a su paso por Algorta reciben ese nombre.

Donde esta ese lugar y quien era Domingo (Txomintxu): El punto conocido bajo ese nombre esta situado al comienzo de la Avenida Basagoiti, en la intersección con la calle llamada Bajada de Ereaga. Ese nombre “Txomintxu” se da la zona alta de la cuesta de Suárez y viene de Domingo Aurrecoechea a quien se apodaba “Chominchu” ya en 1892. Recibe ese nombre desde que Domingo Aurrecoechea Araucoa vino desde su Muxika natal a Algorta, donde fijó su residencia. Al parecer su casa, ya desaparecida, estuvo situada al comienzo de la Avenida Basagoiti, en el lugar que más tarde ocuparía la tienda de ultramarinos de Rosaez. Precisamente en un oleo de Juan José Rochelt Amann podemos ver la zona, seguramente en una época cercana a su asentamiento.

Domingo Aurrecoechea Araucoa debió de llegar a Algorta con tan solo 19 años, en 1857. Dos años después de que el Estado, tras la desamortización de Mendizabal, vendiera terrenos hasta entonces comunales. En esas fechas, según cuenta José María Beascoechea en su obra “Propiedad, burguesía y territorio. La conformación urbana de Getxo en la Ría de Bilbao (1850-1900)”: “...En 1860 Andramari sólo agrupaba un tercio de los habitantes de la Anteiglesia, residiendo los demás en Algorta. En 1900, el porcentaje de Santa María se había reducido al 17%, en Algorta vivía el 56%, y el nuevo barrio de Las Arenas ya contaba con un25%. En estos años, el municipio de Getxo había pasado de 2.156 a 5.442 habitantes)...”

Domingo era hijo del matrimonio formado por Luis Aurrecoechea y Mª Josefa Araucoa naturales de Muxika (Bizkaia). Pero para situar esta historia del pequeño Domingo (Txomin), habría que retrotraernos unos años antes. Cuanta su familia: “...Cuando Luis Aurrecoechea y María Josefa Araucoa casan en algún año de la década de los 30 del siglo XIX. ¡Quién sabe cómo se conocieron: Quizá en una verbena de verano, quizá sus familias fueran amigas...! El hecho es que se casaron y, entre otros hijos, el matrimonio de Luis y María Josefa tuvieron al pequeño Domingo, quien llegó a este mundo el 21 de septiembre de 1838 y fue bautizado el día siguiente en la iglesia de San Vicente de Ugarte, en el pueblo de Muxika (Bizkaia)...”

Sigue contando su historia su familia: “...Un buen día el joven Domingo cogió sus cosas y se fue del pueblo. Tal vez tuviera un espíritu inquieto y aventurero, o tal vez en su marcha influyó la muerte de su padre y la posterior boda de su madre con un tal Ramón Jayo, el día 11 de enero de 1858, de nuevo en la iglesia de San Vicente, cuando Domingo contaba 19 años. Probablemente su madre le diría algo así como: “Txomin, hijo, el caserío y las tierras van a ser para tus hermanos, así que tú veras: o te vas al seminario, o te haces militar”. El caso es que el bueno de Domingo decidió irse a Algorta (lo que tampoco era una mala elección vistas las alternativas), y tuvo suerte, ya que se estableció y prosperó en su nuevo pueblo de adopción...”

Habían transcurrido ya algunos años desde su llegada cuando Domingo, llamado ya Txomintxu por los de Algorta, conoció a Leona; cuenta su familia: “...Se gustaron, Leona era una buena moza, natural de Getxo, donde había nacido el 20 de febrero de 1848 siendo bautizada ese mismo día en la iglesia de Santa María. No sabemos si sus padres, Manuel Larrazábal Yraolaga y Mª Ramona Gorordo Legarra, veían o no con buenos ojos la relación de su hija con Txomintxu (igual le decían cosas como:"¡Pero hija, por Dios, si ése no es de Algorta!"), pero el hecho es que la pareja estaba enamoradísima y acabaron casándose el 11 de noviembre de 1865 en la iglesia de Santa María de Getxo. Leona tenía entonces 17 años y Domingo 27...”

Y sigue el relato de su familia sobre la saga de los Aurrecoechea-Arauca: “...Ya casado, Txomintxu construyó una casa para su familia en Algorta, al final de la cuesta que hoy lleva su nombre...” En una relación de propietarios de solares en la zona de Alangoeta de 1900 aparece Domingo Aurrecoechea Arauco, de profesión cantero, como propietario de una finca de 139 m².

Continua el relato de con algunas informaciones de su saga familiar: “...Allí nació la pequeña Romana el día 27 de febrero de 1869. La bautizaron al día siguiente en la iglesia de San Nicolás de Bari (como se ve, en aquella época era común bautizar a los niños nada más nacer, por si acaso...). Romana pasó una infancia feliz, yendo a la escuela, a la iglesia, ayudando en casa, y —lo que más le gustaba— yendo en verano a coger chirlas y magurios a la playa de Ereaga. Siendo ya una jovencita de buen ver, se encontró un día con un joven llamado Remigio, herrero de profesión, que había llegado hacía poco a Algorta procedente de un pequeño pueblo del nordeste de Burgos a orillas del río Tirón (unos dicen que de Fresneda de la Sierra, otros que del vecino San Vicente del Valle). Quizás a Romana le hizo gracia al principio su porte serio y severo, propio de un herrero castellano, pero su sorpresa fue aún mayor al descubrir que en realidad Remigio, cuando dejaba el yunque, era un cachondo y un "salao". Suponemos que nuestra Romana, como en su día su madre Leona, se quiso casar inmediatamente con su novio, y también suponemos que, como en su día Leona, recibió la consabida amonestación de sus padres ("¡Pero si no es de Algorta!"). Sea como fuere, Remigio Vitores Manso y Romana Aurrecoechea Larrazábal se casaron el 25 de mayo de 1889. Romana, a sus 20 años, ella hubiera querido casarse en la nueva y moderna iglesia de San Ignacio que estaban construyendo muy cerca de su casa, pero todavía no estaba terminada (a pesar de haber comenzado las obras en 1879, no estaría lista hasta el año 1892), así que la boda se celebró en la vieja iglesia de San Nicolás de Bari. Fruto de este matrimonio nacieron Teresa, Isabel y otros muchos hijos, algunos de los cuales acabarían emigrando a Chile...”

En el pleno del 26 de enero de 1893 al tratar sobre un proyecto formado por el arquitecto municipal para la construcción de una alcantarilla en la zona al comienzo de la Bajada a Ereaga se decía: : “...Desde junto de la casa del finado D. Domingo Aurrecoechea (a) “Chominchu”, hasta Ereaga...”

En la base de datos de “Badator” aparece “Domingo Lino Aurrecoechea Araucua” como fallecido en Algorta el día 16 de enero de 1882.

Hasta aquí una pequeña reseña de un vecino de adopción que dejó su impronta y nombre a una de las zonas más señoriales de Algorta, “Txomintxu”.

No hay comentarios:

Publicar un comentario