viernes, 7 de noviembre de 2025

ACONTECERES DEL ÚLTIMO CUARTO DEL SIGLO XIX EN GETXO -449

En la anterior entrada de esta serie sobre el último cuarto del Siglo XIX, veíamos como, en el pleno municipal de Getxo se indicaban los locales destinados al sufragio universal para la elección de Diputados a Cortes.

En el pleno Municipal de Getxo del 19 de marzo de 1898, se trataba sobre la solicitud de un vecino del barrio de Algorta, el cual quería hacer algunas obras en su vivienda: “...Se da cuenta de una instancia de D. Juan Luis Uriarte, vecino de esta, solicitando se le conceda permiso para abrir una ventana en la casa de su propiedad, la llamada “Cueva”, por la fachada que da hacia la calle de la Carretera, así como ensanchar otra existente en la misma casa, por el lado del Hospital Hospicio. El Ayuntamiento acordada aceptar dicha solicitud con la condición de que las ventanas abrieran hacia dentro de la vivienda...”

En ese mismo pleno se trataba sobre una de las personas, que cuando se había producido un caso de viruela, colaboraba para atender y vigilar a los enfermos, y evitar que enseres de esa casa pudieran ser sacados sin previa desinfección: “...Acuerda este Ayuntamiento se paguen a Dña. Juana Artolozaga 90 pesetas, con cargo a imprevistos, por los treinta días de jornal en que permaneció, con motivo de tres casos de viruela, en la casa de D. Martín Oleaga...”

Seguían el plenos y otro de los asuntos sobre los que trató fue las obras de la pared de “Azuarca” en el Puerto de Algorta, obra que había concluido: “...De conformidad al informe emitido por la Comisión designada al efecto, en unión del vigilante de obras del Municipio, acuerda este Ayuntamiento: Recibir definitivamente las obras de murallón de Azuarca, en el Puerto de Algorta, que han sido realizadas por el rematante D. Tomás Guerediaga, dejándole libre del compromiso que contrajo disponiendo se le devuelva la cantidad constitutiva en deposito para la seguridad del contrato...”

En dicho pleno municipal, se trataba sobre un edificio de Algorta que presentaba un aspecto ruinoso, se trataba de uno de la calle San Martín: “...En vista de un escrito del Arquitecto Municipal, en el que da cuenta del estado ruinoso en que se encuentra el resto del edificio llamado “San Martín”. Acuerda este Ayuntamiento: Autorizar a la Comisión de Gobernación y Policía para que proponga a esta Corporación y presente a esta Corporación el medio para evitar cualquier desgracia...”

Seguía el pleno del Ayuntamiento de Getxo, y ya metidos en fechas de celebraciones como la de San José, se recibían una invitación del mayordomo de la Hermandad de San José, de San Nicolás de Bari de Algorta: “...Queda enterado el Ayuntamiento, de un oficio del Mayordomo de la Hermandad de San José, de la Iglesia de San Nicolás de Bari de Algorta, en el que invita a participar en los actos que con motivo de dicha festividad van a realizar. Acuerda este Ayuntamiento: Que en su virtud el Ayuntamiento asista en Corporación, a la misa mayor y procesión que se va a celebrar el día 19 de marzo a las diez de la mañana, en la Iglesia Parroquial de Algorta...”

Entre las cuentas que se aprobaron en aquel pleno municipal del 19 de marzo estaban: “...Se pague a Ángel Egusquiza 14 pesetas por la conducción al cementerio de una niña fallecida con viruela el día 7 del actual.

A la señora viuda de D. Justo Lozano de Bilbao, 380 pesetas por cuatro trajes con sus gorras de paño, confeccionadas para los cuatro guardias municipales.

A D. Domingo Esnal, se paguen 63 pesetas por los 18 días que hizo guardia vigilando las casas donde han ocurrido casos de viruela, para evitar la propagación de la epidemia, hasta el día 8 de febrero...”

Finalizaba aquel pleno con el acuerdo municipal de: “...Colocar cinco metros cuadrados de adoquín de piedra en la Plazuela de Las Arenas entre el meadero y el Puente de Vizcaya...”

La prensa diaria bilbaína recogía en sus páginas noticias de Algorta, que así llamaban algunos periodistas a nuestra Anteiglesia, cuando querían referirse al Municipio de Getxo, y en esa fechas de San José lo hacían refiriéndose a tres temas que estaban sobre la mesa en esos días, la carretera Murallón de Ereaga, la “Sociedad Circulo Algorteño” y las elecciones: “...Carta de Algorta.- Aprovechando los buenos tiempos que desde el domingo pasado disfrutamos, es grande el impulso que se ha dado a las obras del nuevo Murallón-carretera que, partiendo desde el punto llamado Begoña y pasando por la playa de Ereaga, terminará en el Puerto de este pueblo. El contratista de tan importantes obras, señor Iturburu, trabaja sin descanso, ayudado por el señor Garay, y ayer quedo montada una grúa que se usara para el mejor movimiento de peñas y materiales.

La Sociedad “Circulo Algorteño” se trasladará el próximo sábado, festividad de San José, al hermoso edificio que acaba de construir en la calle de la Carretera el activo Industrial D. Agapito Elustondo. Las dependencias de la expresada sociedad reúnen todas las condiciones necesarias para el objeto, están adornadas y decoradas con sumo gusto. Con esta Sociedad, los muchos forasteros que nos visitan en la época estival, tendrán buen centro de recreo, donde serán bien recibidos por todos los socios.

Empiezan ya a notarse en este pueblo los efectos de la Marejada electoral. Entre la gente obrera ha sido muy bien recibida la noticia de que se presentan varios candidatos por esto distrito, pues así dicen, habrá trigo y cereal, muy apreciable máximo en estos tiempos en que tan caro se vende el pan y demás artículos de primera necesitad. Como aún faltan varios días para el de la votación, veremos lo que resulta en este lapso de tiempo...” (El Noticiero Bilbaíno del 19 de marzo de 1898).

Otra prensa bilbaína, esta más de derechas, decía respecto de las elecciones: “...En círculos, cafés y paseos no se habla de otra cosa más que de candidatos y electores; con suma frecuencia se barajan nombres de aspirantes a representantes en Cortes sin que ellos lo sepan. En lo que hay unanimidad de pareceres es en que una vez más se dará en Vizcaya el espectáculo de compra de votos...” (El Nervión del 19 de marzo de 1898).

Entre tanto algunas suscriciones a favor de los soldados que, heridos o enfermos, regresaban de las campañas de Cuba y Filipinas, y en nuestra anteiglesia algunos centros recogían fondos para ellos, entre aquellos estaban: “...Colegio de San Bernardo de Algorta y el Colegio de San José de Algorta...” (El Nervión del 19 de marzo de 1898).

En la próxima entrada de esta serie veremos como, el Ayuntamiento fijaba las condiciones de las comidas para los miembros de las mesas electorales.


No hay comentarios:

Publicar un comentario