En
la anterior entrada veíamos cómo los chatarreros de Las Arenas
hacían negocio con los restos de los naufragios ocurridos en nuestra
playa
El
16 de junio de 1891 el diario bilbaíno “El Nervión” recogía en
sus páginas los avances de las obras del Puerto del Abra, en
concreto se referían al del rompeolas (contramuelle) de Santurtzi.
En el diario decían: “...La
inmensa mole de piedra que ha de constituir el futuro rompeolas,
parece que va surgiendo por momentos de las profundidades del mar. Un
trozo de muelle como de veinte metros sobresale aún en marea alta,
en la parte de tierra, que es por donde se ha empezado la
construcción del rompeolas, en la bajamar se ven muchos más
metros...”
El
día 17 de junio de 1891 se anunciaba en “El Noticiero Bilbaíno”
la apertura del “Hotel Larrazabal” de Las Arenas: “...Magnífico
Hotel establecimiento, situado en uno de los mejores puntos y próximo
a la playa, montado con arreglo a los últimos adelantos, tanto en lo
que concierne al gusto, a la elegancia e higiene, cómo a la economía
y los precios...”
Aquel Hotel decían que estaba montado con un esmerado servicio de
diferentes tendencias, tanto local, como francesa e inglesa. Para
recabar información y realizar reservas había que dirigirse a los
responsables de cocina y repostería que eran los dueños, quienes
anteriormente habían trabajado en el establecimiento de Baños de
Mar Bilbaínos de la familia Aguirre. Mientras que se anunciaba la
apertura de este último establecimiento de baños, regido por D.
Ándres Larrazabal, para el día 1 de julio.
Otro
de los establecimientos de Las Arenas que anunciaba su apertura para
la temporada era el “Casino de Las Arenas”, establecimiento que
se encontraba junto al muelle, próximo a la playa. Disponía el
casino de grandes salones, restaurante, café, billares y salón de
baile. Todos aquellos que deseaban disfrutar de sus instalaciones
podían adquirir entradas quincenales, mensuales y de temporada. La
apertura se iba a efectuar desde el día 15 de junio al 15 de
octubre.
Se
anunciaba también el nombramiento por el Presidente de la Audiencia
de Burgos de los jueces municipales de Bizkaia, nombramiento que en
el caso de Getxo recayó en el Juez D. Remigio Anchia Fano.
El
20 de junio de 1891 el Ayuntamiento de Getxo se daba por enterado de
la comunicación recibida del encargado de la Estación Telegráfica
de Las Arenas, en la que informaba que pasaba a hacerse cargo del
servicio de Correos y telégrafos a partir del día 17 de junio. Se
daba cuenta también de la solicitud, que el Ayuntamiento aprobaba,
del nombramiento como ordenanza de la Estación Telegráfica
Municipal de Algorta a D. Manuel Fernández Blanco.
El
27 de junio de 1891 el Gobernador Civil de la Provincia ordenaba le
fuera remitido por los ayuntamientos el censo de población, y aunque
no se precisara en el acta municipal cuántos vecinos habitaban la
anteiglesia, ya que en 1887 Getxo contaba con 3.781
habitantes y en 1897 la población de hecho era de 5.211 habitantes,
se puede extrapolar que podrían ser en torno a los 4.500 habitantes,
ya que el Instituto de Estadística en aquellas fechas estimaba que
en Bizkaia se había producido un incremento de población del
24,06%.
Por
esos días la persona encargada del suministro de carbón piedra para
las estufas municipales era Dña. Timotea Larrauri. Y D. Francisco
Ibatao, de Santa María, el encargado de la poda y arreglo del
arbolado público.
El
día 1 de julio de 1891 tomaba posesión el nuevo Ayuntamiento salido
de las elecciones del 10 de mayo: A las 10:40 de la mañana se
constituyó nuevamente el Ayuntamiento quien fue recibido por los
miembros cesantes. El Ayuntamiento quedaba formado por:
Los
elegidos el 10 de mayo los cuales eran: D. Saturnino Azcorra
Maidagan, D. Asencio Inchaurtieta Gorrondona, D. Santiago Diliz
Arana, D. Juan José Camiruaga Mota, D. Braulio Ajuria Ajuria, D.
Román Uribarri Bareño y D. Sabino Laca Orbeta.
Y
los que quedaban (continuaban) de la anterior corporación: D. Juan
José Unzaga Campo, D. Juan Bautista Carrandi Arrigunaga, D.
Sebastián Sainz Garcia y D. Pedro Icaza Aguirre.
Tras
dar posesión al nuevo Ayuntamiento se dió posesión a sus miembros, bajo la presidencia interina de D. Saturnino Azcorra, tras ese
tramite se procedió a la elección del Alcalde. Fue elegido por
unanimidad D. Santiago Diliz Arana. Seguidamente se procedió a la
elección de los dos Tenientes de Alcalde quedando como Primer
Teniente de Alcalde D. Asencio Inchaurtieta y como Segundo teniente
Alcalde D. Braulio Ajuria. Todos ellos recibieron sus
correspondientes bastones de mando. Para Síndico, con sus
obligaciones de defensa de los intereses municipales en juicios y
revisión de presupuestos y cuentas municipales, fue elegido D.
Sabino Laca.
Se
decidía de acuerdo con lo preceptuado en artículo 57 de la Ley,
celebrar las sesiones ordinarias todos los jueves a las nueve de la
mañana, y cuando cayeran estos en festivo, hacerlo los miércoles.
A
continuación se eligió por sorteo el orden de los regidores para en
los casos de que no estuviera el Alcalde, poder ocupar interinamente
su puesto. La elección dio el siguiente resultado:
1º)-
D. Juan José Unzaga.
3º)-
D. Pedro Icaza.
4º)-
D. Sebastián Sainz.
5º)-
D. Saturnino Azcorra.
6º)-
D. Juan José Camiruaga.
7º)-
D. Román Uribarri.
Por
último en función de las facultades que le confería el artículo
58 de la Ley hizo los nombramientos de los Alcaldes de barrio,
nombrando a los siguientes vecinos: Por Las Arenas d D. Pedro Llona y
por el Puerto a D. Manuel Ignacio Ugarte. Al día siguiente, 2 de
julio de 1891, se procedía al nombramiento de las Comisiones que iba
a tener la Anteiglesia:
Para
la Comisión
de Hacienda
se nombraba a D. Sabino Laca y D. Román Uribarri.
Para
la Comisión
de Obras Públicas, caminos y vías
se nombraba a los Tenientes de Alcalde D. Asencio Inchaurtieta, D.
Braulio Ajuria y los regidores D. Juan José Unzaga y D. Saturnino
Azcorra.
Para
la Comisión
de Fomento, Policía Urbana, Rural y Deslindes
se nombraba al 2º Teniente de Alcalde regidor y Síndico D. Sabino
Laca y a D. Pedro Icaza y D. Juan José Camiruaga.
Para
la Comisión
de Reconocimiento de leche, pan, carne, frutas y Pesas y medidas de
los establecimiento Públicos se
nombraba a dos concejales diferentes cada mes comenzando por D.
Asencio Inchaurtieta y D. Sabino Laca.
Quedando
cómo Regidor
Interventor
D. Juan Bautista Carrandi.
La
afición a los baños de mar en la playa de Ereaga llegaba desde
fuera de nuestros limites geográficos y era demandado, incluso, para
la utilización de casetas de baños, así un 2 de julio de 1891:
“...Se
ha presentado una instancia por D. Javier Huarte, vecino de Madrid,
solicitando autorización para instalar una caseta de baños con
destino privado en la playa de Ereaga...”
El Ayuntamiento accedía a condición de que: “...La
misma se instalará fuera de la zona asignada para la colocación de
los lotes de casetas de baños, dejando libre el paso de acceso y
servicio de las mismas...”
El
Ayuntamiento de Getxo acordaba: “...Autorizar
al Alcalde Presidente para que gestione ante quien corresponda y en
su representación, gestione la instalación de un puesto de la
Guardia Civil...”
La
actividad académica tenía también su reflejo en las actas
municipales: El día 3 de julio se iban a celebrar los exámenes de
francés y comercio. El día 4 de julio los de música. A la vez que
se organizaba el reparto de premios para los niños de ambos sexos de
todas las escuelas de la Anteiglesia, que iba a tener lugar en la
Casa Consistorial el día 12 de julio. El
Colegio de Francés y Comercio estaba situado, daba a las calles San
Nicolás y Rivera, según recogía el inventariado de bienes de 1889.
Varias
eran las obras de reparación de calles que se iba a acometer en el
municipio ese 2 de julio: “...Reposición
y resebo de la calle en Las Arenas que se dirige de la estación de
Ferrocarril al Hotel de Baños de Mar Bilbaínos; en Algorta la parte
degradada de la bajada a Ereaga, el trozo de la calle Mayor
comprendido desde el Casino Algorteño a Altamira y el callejón
existente entre la casas de los señores Benguria y Juan Luis
Uriarte...”
Y
se comisionaba al concejal Sr. Uribarri para contratar una banda de
música que tocará, al igual que el año anterior, durante la
estación del verano en Las Arenas.
En
la próxima entrada de esta serie veremos cómo se recibía una carta
de D. Antonio Loma sobre el estado de los expedientes de
fortificaciones y suministros militares de la última guerra.
¿Es la playa de Las Arenas?.
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